"Embarazada y con síntomas": el drama que ya se le informó a la Reina Isabel

La última aparición pública de la Reina Isabel fue en la típica misa dominical donde siempre asiste: creyente como pocos en la familia real británica, hay un caso que se le informó a Su Majestad y es por quien todas sus oraciones velan. Al dramático momento del primer ministro Boris Johnson internado por coronavirus, ahora se suma la triste noticia de su pareja, quien confirmó que está: "Embarazada y con síntomas".

La Reina Isabel se mantiene en permanente contacto con el entorno del primer ministro Boris Johnson, quien este domingo lamentablemente fue hospitalizado diez días después de haber dado positivo por coronavirus. El cuadro de salud del premier británico es reservado.

Pero no es todo: las noticias son delicadas y han llegado al castillo de Windsor donde la Reina Isabel cumple el confinamiento. Ocurre que el portavoz oficial del jefe de Gobierno, tras confirmar que Johnson ingresó en la UCI, ahora indicó que Carrie Symonds, pareja y madre de su futuro hijo, muestra síntomas de padecer coronavirus.

La propia Carrie ha comunicado la noticia que sacuden las horas de la Reina Isabel y del Reino Unido luego de escuchar a Su Majestad: la primera dama de Reino Unido ha expresado su preocupación ya que se encuentra a la espera de su primer hijo: "Pasé la semana pasada en la cama con los principales síntomas del coronavirus", reconoció.

"No me hice la prueba y, después de siete días de descanso, me siento más fuerte y estoy en plena recuperación. Estar embarazada y tener COVID-19 es obviamente muy preocupante. A las mujeres embarazadas, por favor, lean y sigan esta guía actualizada que es de lo más tranquilizadora", indicó la Primera Dama del Gobierno británico, en una noticia que eclipsó el histórico comunicado de la Reina Isabel.

Hace poco más de un mes, a través de un comunicado, la pareja de Boris Johnson y Carrie Symonds, anunciaban que serían padres el próximo verano. El propio premier británico se lo confirmó a la Reina Isabel en uno de los llamados diarios entre Downing Street y el Palacio de Buckingham.

Carrie Symonds tiene 31 años y, pese a la noticia que ha preocupado desde la Reina Isabel hasta el último británico, ha expresado sus deseos de recuperarse plenamente, esperar el alta de su marido y que toda esta pesadilla termine de una manera soñada: dando a luz en su propia casa: "Ella quiere hacer las cosas a su manera". Que así sea. Es el deseo de la Reina Isabel, de la familia real, y de todos.