"Me protegió demasiado": la declaración del padre de Nahir Galarza que podría complicarlo aún más

Tras las declaraciones de Nahir Galarza sobre su padre respecto del asesinato de Fernando Pastorizzo, la causa que parecía estar cerrada vuelve a resurgir con viejas hipótesis. “Nahir me protegió más de lo debido, no quería que yo tuviera problemas y tomó la peor de las decisiones”, había asegurado Marcelo Galarza.

De esta manera, el padre de Nahir Galarza había explicado el motivo por el cual habría ocultado la presunta violencia de género que habría sufrido la joven condenada a cadena perpetua. Sin embargo, a partir de su nueva denuncia y del divorcio con Yamina Kroh, la causa volvió a quedar expuesta.

Según la nueva denuncia de Nahir Galarza, su padre habría sido quien asesinó a su expareja y ella se habría inculpado para evitar que sus padres fueran a prisión. 

“Yo no lo maté a Fernando, fue papá. Quiero que acuses al verdadero asesino y a los corruptos que taparon lo que pasó de verdad aquel día”, le contó la joven de 23 años a su abogada, Raquel Hermida Leyenda.

En este sentido, su abogada también presentó una denuncia contra el fiscal a cargo de la causa, Sergio Rondoni Caffa, y al abogado Marcelo Reborsio, quien defendió a la acusada en primera instancia. A partir de aquello, la letrada solicitó medidas de seguridad para la madre y su hermano.

Cabe destacar que, en este contexto, la fiscalía de la ciudad de Gualeguaychú desestimó la denuncia de Nahir Galarza contra su padre: “Se debe proceder a la desestimación in límine en relación con lo expresado de que sería Sr. Marcelo Galarza -padre de Nahir- el autor del homicidio de Fernando Pastorizzo”.

Qué dijo la abogada

A partir de la nueva denuncia de Nahir Galarza, Hermida Leyenda explicó a Página 12 que se encontró con “una chica desesperada, me había llamado hacía varios días porque quería hablar conmigo, porque se había dado cuenta de que su padre nunca iba a decir la verdad”.

Respecto a la presunta responsabilidad del padre por el crimen de Fernando Pastorizzo, la letrada indicó que “no era un arreglo, era un mandato de padre a hija. Una hija que le tiene más miedo al padre que a estar presa”.