Tras los vestigios de la fiesta, Kylie Jenner pasó tiempo con su hija y ostentó sus bienes
La empresaria lanzó una nueva colección de make-up.En Instagram, la red social preferida por el ego de los famosos, Kylie Jenner tiene 183 millones de seguidores que se deleitan con todo lo que ella comparte. Desde momentos de la vida diaria, selfies, sus bienes y lujos, y todo lo que entre en una foto.
Este fin de semana la menor del clan Kardashian-Jenner estuvo de fiesta por celebrarse el cumpleaños número 36 de su hermana Khloé y los vestigios de la reunión dieron de qué hablar.
Es sabido que la empresaria fundadora de la marca Kylie Skin es una gran organizadora de eventos sociales y cada vez que hay algo por lo que brindar en la familia, ella "se pone la 10" y se luce con tremendas puestas en escena.
Este sábado no fue la excepción porque hasta un inflable con el rostro de Khloé contrató la mamá de Stormi para sumar diversión y color a los archivos que seguramente irán a formar parte de los episodios de "Keep up with the Kardashian".
Además, las hermanas montaron un show digno de las Kardashians, en el que la siempre perfil bajo Kendall y la cumpleañera Khloé pelearon por un clutch bag, mientras todo era risas y juegos la dueña de Kylie Cosmetics aprovechó y documentó todo.
Por otro lado, la celebridad bajó los decibeles este domingo al compartir un rato con su hija y con sus fans de Instagram. Derrochando amor, la ex pareja de Travis Scott fotografió a su hija Stormi mientras elegía con qué juguetes iba a divertirse.
Y de paso, como es normal en las hermanas más famosas de la televisión estadounidense, la hija de Caitlyn Jenner ostentó su grandioso Mercedes Benz Clase G 63, que como saben... ¡adora! Ya que fue su madre la que contó que Kylie usaba tanto el auto de ella que terminó diciéndole que se comprara uno.
Y como el éxito se lo permite, la actriz del reality se da esos gustos. Además le va muy bien, recientemente lanzó junto a su hermana la colección de maquillajes "Kendall by Kylie Cosmetics" y fue un éxito desorbitante, ya que a los 30 minutos de haberse lanzado el kit se había agotado.