La historia del souflé y las variantes para preparar en casa

Se puede elaborar en versiones saladas con verduras o quesos.
miércoles, 11 de noviembre de 2020 · 15:48

La palabra souflé nos remite a un plato delicioso y fácil de hacer, el cual puede servirse como primer plato o, también, como cierre del menú.

Es un término que proviene del idioma francés, en el que souffler significa soplar. Y es que la preparación del souflé se infla cuando se introduce en el horno.

Una de las primeras apariciones que tuvo este plato en la bibliografía relacionada a la cocina fue, nada menos, que en 1928, en el libro “Fisiología del Gusto”, de Antheleme Brillat-Savarin .

Según cuenta la historia, fue creado en la corte del rey Luis XIV por el chef que cocinó para las mujeres.

El souflé puede prepararse salado con ingredientes como salmón, queso, verduras y otros condimentos y, también, como postre en el que se destaca el de chocolate o el de frutas.

Para preparar un souflé salado, primero, se requiere realizar una salsa blanca o bechamel, o algún puré al que se le agregan yemas de huevo.

Por otra parte, se deben batir claras de huevo a punto de nieve. El aire que queda en su espuma hará que, una vez en el horno, el souflé se expanda y se crezca.

Para que el souflé no se baje en su leudado, se recomienda colocar los ingredientes sólidos -como pescado o verduras- en el fondo del recipiente que va al horno y, posteriormente, verter, encima, la mezcla. 

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