La nueva línea orgánica de una bodega tradicional
Es la mendocina Santa Julia. El Burro es su primer exponente.
Hacia fines de 2019, se abría un nueva camino para una de las bodegas más emblemáticas de Mendoza y de toda la Argentina. Santa Julia daba a conocer El Burro, su primer vino elaborado con uvas Malbec 100% orgánicas procedentes de Maipú.
Bodega Santa Julia posee 305 hectáreas, parte en Maipú y parte en Santa Rosa aunque todas cuentan con certificación orgánica concedida por la empresa Letis. La idea de la bodega es apostar a la viticultura natural.
En el caso de El Burro Santa Julia además durante su proceso de elaboración no se le agregan sulfitos (actúan como antioxidantes) y además para su fermentación usan levaduras indígenas o autóctonas.
Los representantes de la bodega se mostraron muy satisfechos en aquel momento y sobre todo porque es el inicio de un camino trazado, según detalló Rubén Ruffo, Gerente de Enología de Bodega Santa Julia.
“Los vinos naturales son los menos intervenidos por el hombre, pero también son los que requieren el mayor cuidado durante todo su proceso, especialmente en su elaboración al quedar desprotegidos ante bacterias y oxidantes”.
Además, este vino posee certificación Fair For Life por la cual se garantiza que los empleados de la bodega cumplieron su labor con condiciones justas de trabajo.
En relación al tema orgánico, Nancy Johnson, embajadora de la marca Santa Julia, sostuvo se da un uso racional del terroir ya que se siembra cereales como la cebada o la avena además de flores amarillas, blancas y violetas, que atraen distintos tipos de insectos, lo que mejora la oxigenación de los suelos.
La especialista manifestó en una nota al sitio Viómanos que aunque ser sustentables es muy apreciado, la mayoría de los consumidores de vino no estaría dispuesto a pagar un plus por un vino orgánico o sustentable.
