Arroz con pollo, una receta a prueba de fallas

El arroz con pollo demuestra que en el mundo de la gastronomía solo se necesitan dos ingredientes básicos para realizar un plato delicioso y tradicional. Aunque en cada continente existe una forma distinta de llevar a cabo esta receta, el procedimiento es tan simple que la convierte en una alternativa a prueba de fallas. 

Esta preparación clásica, que ocupa un lugar especial en la mesa familiar desde hace varias generaciones, no pierde su sabor característico con el paso del tiempo e incluso ayuda a que los integrantes menos habilidosos en la cocina puedan sorprender a todos con los resultados.

A la hora de realizar este plato familiar, es importante tener en cuenta las cantidades. Los expertos en gastronomía aseguran que los ingredientes necesarios para que 4 comensales puedan disfrutar de esta receta son: 4 muslos de pollo, una taza de arroz, una cebolla, medio ají rojo, 2 vasos de caldo de gallina, 200 gramos de arvejas congeladas, una cucharada de azafrán y 2 cucharadas de aceite de oliva.   

La receta indica que lo primero que tenés que hacer para realizar un buen arroz con pollo es colocar los muslos en una sartén junto con un poco de aceite de oliva, para que se vayan dorando de ambos lados. Asegurate de que la hornalla esté a una temperatura relativamente alta para que el proceso no tome tanto tiempo. Luego, cortá en juliana el ají rojo y picá la cebolla. Ambos ingredientes se picarán en una cacerola para que se vayan cocinando junto con la carne blanca.

Cuando el pollo, la cebolla y el ají rojo se cocinen por algunos minutos en la cacerola, se puede agregar el caldo de gallina, el azafrán y las arvejas. El arroz lo colocarás a partir del momento en el cual la preparación empiece a producir burbujas y una vez que se integra hay que esperar aproximadamente 20 minutos a fuego bajo, para que los granos alcancen el punto de cocción ideal. El último paso consiste en dejar reposar la receta y servirla en la mesa familiar.