Alcauciles al infierno: conocé la receta que tienta a pecar
Una manera distinta de consumir alcachofas.
Tras la primera guerra mundial, los inmigrantes italianos fueron los encargados de presentarles a los argentinos los encantos de consumir alcauciles. A partir de ese momento, el país comenzó a cosecharlas y en la actualidad hay más de 300 hectáreas produciendo esta hortaliza que podría tentar a muchos al pecado.
Para las personas que suelen consumir la alcachofa, separando cada uno de sus pétalos para condimentarlos con un poco de sal, aceite de oliva o incluso jugo de limón, existe un plato que hará que cambien este hábito para incorporar una nueva receta a su menú, se conoce bajo el nombre de alcauciles al infierno.
Lo primero que se debe hacer para cocinar alcauciles al infierno es lavar las hortalizas con abundante agua fría, en la receta se utilizarán entre cuatro o cinco unidades, es importante asegurarse de que quede lo más limpia posible y que no queden restos de tierra. Luego, se retirará el tallo, el contenido de su interior y las hojas más pequeñas, dañadas u oxidadas que contenga. Hay que hervir la alcachofa por aproximadamente 15 minutos.
A la hora de preparar el relleno se necesitarán: una pizca de perejil picado, dos cucharadas de queso rallado, 105 gramos de migas de pan en leche, cuatro dientes de ajo cortados en trozos muy pequeños y cocinados con una cucharada de manteca. Todos estos ingredientes se mezclaran para luego incorporarse dentro de las alcachofas.
Algunos de los condimentos que se recomiendan utilizar para realzar todos los sabores, son: ají molido, pimentón dulce, bastante pimienta y sal a gusto.
Fuente: ( Cuk-it!)
El último paso consiste en colocar las alcachofas lo más rectas posibles sobre una bandeja y llevarlas al horno hasta que el queso se gratine y adquieran un tono dorado. Los expertos en cocina recomiendan que antes de consumir los alcauciles al infierno, cada comensal separe las hojas que se caracterizan por ser menos suaves y opte por combinar el relleno con las que tienen una consistencia más tierna.
