El movimiento de los arqueros en Boca, ¿vuelve un amigo de Román?

Si bien parece faltar mucho y no hay certezas de cómo se daría, de cara a la reanudación del fútbol argentino los equipos empiezan a diagramar el armado de sus planteles. En Boca, uno de los temas a resolver es el arco.

Actualmente el Xeneize cuenta con cuatro arqueros: Esteban Andrada, Marcos Díaz, Manuel Roffo y Javier Bustillos, estos últimos dos producto de las inferiores. Pero como pasa en cada mercado de pases, las probables salidas traen a colación posibles nombres nuevos en Casa Amarilla.

A los nombrados hay que sumarle el regreso de Agustín Rossi que finaliza su préstamo con Lanús. Claro, a simple vista parece un puesto súper cubierto que mezcla experiencia con proyección, pero hay algunos factores que preocupan al conjunto de La Ribera.

Sabandija, de gran consideración por Scaloni en la Selección, es uno de los jugadores más vendibles del equipo por edad (29) y por que estuvo en la mira de varios grandes de Europa. Desde el Viejo Continente también pretenden llevarse al ex Globo, que analiza no extender su vínculo que finaliza en junio para poder emigrar al Leganés español. Tampoco es claro el futuro de Rossi, quien ya manifestó que como suplente no quiere regresar a Boca.

Así las cosas, pese a tener blindado el arco en los últimos torneos, el Xeneize deberá volver a buscar un arquero de garantías. Desde que se frenó la actividad, varios nombres sonaron en la secretaría técnica, liderada por Juan Román Riquelme.

Fernando Muslera, Álvaro Montero y hasta Gerónimo Rulli, fueron algunos arqueros que desfilaron entre los deseos de los hinchas, sugerencias de ex futbolistas y convicción de la Comisión Directiva. Ahora, reflota la oportunidad de que Javier García se sume a esta lista, pero para concretar la llegada, respaldada por Jorge Ameal y súper avalada por Román, para ponerse de nuevo el buzo azul y oro.

El arquero de 33 años, íntimo amigo de Riquelme, es suplente de Gabriel Arias en Racing y desde que llegó al club de Avellaneda en 2017 ya renovó tres veces su contrato y ahora deberá hacerlo nuevamente si quiere seguir en el Cilindro, aunque las negociaciones se estancaron y la tentativa del club boquense puede pesar mucho en su decisión. Con pocas, pero buenas actuaciones en el equipo de Beccacece, la opción está más latente que nunca y el propio Ameal, en diálogo con La Red, le abrió la puerta y manifestó:

"Con Javi tengo una gran relación y lo quiero mucho. Fue arquero nuestro cuando salimos campeones en el famoso partido contra Tigre en cancha de Racing, por el Apertura 2008. Tengo un cariño muy particular, pero tenemos el consejo de Fútbol, a Román y a nuestro cuerpo técnico para decidirlo. Es un excelente arquero".