La CECHA alertó por la pérdida del volumen en la venta de combustibles

La CECHA (Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines de la República Argentina) dio a conocer su informe de fin de año. En el escrito, analizan el panorama de los combustibles.

En el documento, la entidad alerta “por el impacto de la recesión que atraviesan las estaciones de servicio desde abril de 2018”. Para su elaboración, la CECHA tomó datos de la Secretaría de Energía de la Nación.

Allí, la CECHA explicó que hubo una “caída del volumen de ventas producto del combo recesión más pandemia, donde descubrieron que se perdió la venta equivalente a 5,2 meses de ventas”.

“Cuando la pandemia nos encontró en marzo de 2020, la situación de las estaciones era complejísima, ya que veníamos de casi dos años de recesión”, recordó Gabriel Bornoroni, presidente de la organización.

En ese sentido, señaló que “comparado con abril de 2018, el punto donde comienza este cuadro de caída, el COVID19 nos agarró casi 6 puntos por debajo de los valores de ese mes. La pandemia potenció todo”.

Según el informe, “a octubre de 2021, el volumen de ventas es casi tres puntos porcentuales por debajo de abril de 2018, inicio de la recesión”.

Asimismo, la CECHA calculó que “a lo largo de este período se perdieron de vender 8.2 millones de m3 de combustible por el combo recesión+pandemia, el equivalente al despacho de cinco meses completos”.

A lo largo de casi cuatro años perdimos alrededor de medio año de ventas.

Un mito desmentido

En otro tramo del informe, la CECHA desmintió el mito que afirma que los aumentos de nafta luego se trasladan al resto de los productos”. Para probar su punto, compararon la evolución de los precios de productos de la canasta básica durante los últimos seis meses.

“Los precios al consumidor se incrementaron un 13,1% y los precios de alimentos y bebidas subieron 11,7%”, explicó la confederación, al tiempo que resaltó que en ese mismo periodo las naftas se mantuvieron congeladas.

“Es  vital combatir este mito, porque le abre la puerta a aumentos discrecionales por parte de algunos vivos, que aumentan por las dudas un 5% cuando la nafta sube 5%, aun cuando el combustible no sea una parte representativa de sus costos”, apuntaron.

Finalmente, precisaron que: “Esto genera luego que los combustibles sufran largos congelamientos, que no combaten la inflación y para nosotros son dramáticos”.