Advierten que las estaciones de servicio atraviesan una "situación crítica"
Las ventas del sector no logran alcanzar los niveles obtenidos antes de la implementación de la cuarentena.
El presidente de la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines de la República Argentina (CECHA), Gabriel Bornoroni, analizó el impacto del coronavirus en las estaciones de servicio de todo el país y advirtió por una ”situación crítica”.
De acuerdo al informe mensual de la asociación, en mayo las ventas de combustibles registraron un leve crecimiento pero aún no alcanzan los niveles obtenidos antes de la implementación de la cuarentena, con bajas del 35%.
La actividad relacionada con la venta y comercialización de las estaciones de servicio fue determinada como “esencial” dentro del decreto del Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio. Por lo tanto, el sector continuó operando a través de normas y protocolos de seguridad.
Pese a esto, la medidas implementadas en la cuarentena restringieron la circulación y redujeron notablemente el consumo de naftas y gasoil en el país. Al respecto, desde CECHA señalaron que con el levantamiento parcial de aislamiento en distintas partes del país, exceptuando AMBA, “las ventas comenzaron a repuntar, pero aún se encuentran lejos de los valores previos a la pandemia”.
“Si bien continuamos en una situación crítica para todo el sector de las Estaciones de Servicio, siendo la mayor parte de los estacioneros PyMEs, podemos encontrar en este último informe algunos indicios de recuperación. Lo que podremos ver con precisión en el informe es cuánto impactó el Covid en el sector, es decir la caída entre febrero y abril. Y cuánto falta todavía con los números de esa pequeña recuperación en mayo”, indicó Bornoroni.
Según la organización, entre abril y mayo, el expendio de combustibles creció un 23,3% en volumen pero a comparación con febrero, se observa que la baja es del 35,5%. Respecto a la facturación, la industria perdió aproximadamente 31.587,2 millones de pesos.
“La mayoría de los estacioneros son PyMEs, que vieron caer sus ingresos dramática o totalmente. Muchos de ellos ya pidieron créditos o se consumen los ahorros de su bolsillo para pagar los sueldos y ahora se suma el aguinaldo”, advirtió la autoridad de la asociación.
Para concluir, la Confederación detalló que en la Ciudad de Buenos Aires, donde se encuentran la mayoría de los enfermos de coronavirus y aún continúa el aislamiento, las ventas bajaron en un 59% de febrero a mayo y expresaron que la situación “podría empeorar si se mantiene el pico de casos y se endurecen finalmente las medidas de cuarentena”.
