REALEZA

La muerte que más duele: la noticia que devasta a la Reina Letizia

"Era muy trabajadora y luchadora. Creo que se sentiría muy orgullosa de mí". 
lunes, 6 de enero de 2020 · 21:46

La muerte de Érika Ortiz, la hermana de la Reina Letizia, que se quitó la vida en 2007 es la que más duele en Zarzuela: ahora la única hija de Érika, Carla Vigo, sobrina de la reina Letizia, ha concedido su primera entrevista. Ha sido este pasado fin de semana en el programa Viva la Vida de Telecinco, donde ha hablado de su madre, su relación con la familia real o sus intereses personales. El reportaje ha devastado a Letizia.

La sobrina de la Reina Letizia dijo que no quiere saber nada con su tía ni la familia real: "no soy como ellos, nunca lo seré". Sí se mostró muy emocionada al hablar de su madre. Aunque confesó que no guarda muchos recuerdos porque "era muy pequeña", aseguró que su padre, su abuela y el resto de la familia le han hablado mucho de ella: "Era muy trabajadora y luchadora. Creo que se sentiría muy orgullosa de mí". 

Érika Ortiz Rocasolano, la hermana pequeña de la Reina Letizia, se quitó la vida en 2007, a los 31 años. Su cuerpo fue hallado en su domicilio del barrio de Valdebernardo de Madrid, que había sido el hogar de Letizia Ortiz hasta que contrajo matrimonio con el ahora rey Felipe VI. Allí vivía con Carla, que entonces tenía seis años.

Tras la muerte de su madre, Carla ha vivido muy alejada del foco mediático. Se mudó a Aranjuez con su padre, Antonio Vigo, ahora casado y padre de otros dos hijos, pero ha mantenido un trato cercano con su tía, la Reina y sus primas Leonor y Sofía, con quienes ha pasado algunas vacaciones y son frecuentes sus visitas al palacio de La Zarzuela. Preguntada sobre su relación con su tía Letizia, Carla Vigo admitió que no termina de asumir que sea la esposa de Felipe y, por tanto, reina de España.

"No acabo de asumirlo, está tan metido en mí que no me siento como ellos. Creo que soy una persona normal". Es quizás la pérdida de su anonimato lo que más le ha costado aceptar, pues aseguró que la primera vez que vio su nombre en un medio de comunicación se sintió "como si me hubiesen desnudado". "Sentí que ya nada en mí era anónimo y, la verdad, no me siento muy cómoda", contó.