Al borde de la muerte: aquí fue el dramático momento de Camilla Parker Bowles

Camilla Parker Bowles dejó de ser la más odiada de la realeza británica y con mucho esfuerzo se ganó un lugar en el corazón de los ingleses. Da fe de ello lo que sufrió a bordo de un helicóptero cuando estuvo al borde de la muerte: la esposa del Príncipe Carlos sufrió un percance mientras volaba: el percance fue doble, ya que el aparato en el que viajaba estuvo a punto de sufrir dos graves accidentes ese mismo día.

A un año y medio de los incidentes, el diario británico Daily Mail ha desvelado los motivos ahora gracias a personas que estuvieron implicadas en el mismo y a nuevos informes que han salido a la luz. Todo ocurrió aquel día en el que Camilla Parker Bowles había visitado durante la mañana una exposición floral en Sandringham, la residencia de la Reina Isabel.

A las 13.10, Camilla Parker Bowles tomó un vuelo desde Anmer Hall, la cercana residencia del Príncipe William, que la llevaría hasta su casa en Wiltshire. Lo hizo en un aparato Sikorsky S76, de la flota aérea de la reina y de los que suele usar la familia real británica. Entonces, y a una velocidad de casi 420 kilómetros por hora, el helicóptero consiguió evitar —por apenas nueve segundos— un choque contra un avión que transportaba a un grupo de paracaidistas. Según un controlador aéreo de Norfolk que monitorizaba el vuelo, el riesgo de la colisión fue "alto". 

El incidente ocurrió apenas seis minutos después de despegar, cuando el piloto observó otro aparato que había despegado de Cambridgeshire y que se dirigía por el noroeste hacia el Sikorsky en el que viajaba la esposa del heredero al trono británico. Al parecer, tanto desde el helicóptero como desde tierra trataron de alertar a dicho aparato de que volaba en la misma dirección, pero según los informes, su piloto estaba "distraido por los pasajeros de la parte de atrás" y no se enteró hasta que estuvo casi encima. Afortunadamente, ambos viraron justo a tiempo para evitar la catátrofe.

El susto de Camilla Parker Bowles y de su equipo no quedó ahí. Apenas 45 minutos más tarde, cuando ya estaban descendiendo para tomar tierra, tuvieron que realizar de nuevo una maniobra de emergencia a 260 kilómetros por hora para evitar un ala delta que se encontraba por la zona. El propio piloto ha explicado que tuvo suerte al ver al planeador a unos 800 metros de distancia, porque estaba volando "en dirección al sol", lo que complicaba especialmente la visibilidad. Camilla Parker Bowles iba sola en ese vuelo. Su marido se había quedado en Anmer Hall tras la muestra floral.