Después de los escándalos: nadie conducirá la entrega de los Premios Oscar
Los premios de la Academia buscan realzar la popularidad después de los escándalos sexuales, xenófobos y racistas de sus máximos exponentes.
El año 2018 fue una catástrofe de raiting para la entrega de los Premios Oscar. Anfitriones irrespetuosos o que posteriormente fueron denunciados por racistas y xenófobos o incluso entregas completas sin nominaciones de artistas afroamericanos llevaron a que la popularidad del premio cayera en decadencia.
Incluso muchos actores hace varios años decidieron no volver a pisar la alfombra roja por estar en contra de la manera en que se adjudican los premios estableciendo que también ahí existen grandes dosis de corrupción y millones de dólares de por medio.
La baja popularidad de los Oscar tuvo elementos muy controversiales como la negativa de la academia de entregar un premio a Leonardo Dicaprio aunque el actor había desempeñado papeles nunca antes vistos como en "El Aviador" o "El Lobo de Wall Street" y la principal teoría que se manejaba era por su amistad férrea con Martin Sorsese, enemigo acérrimo de los premios.
Y para seguir sumando metidas de patas, la denuncia múltiple que muchas mujeres hicieron al productor Harvey Wenstein por abuso sexual y por solicitar favores sexuales a cambio de que las actrices pudiera estar en un lugar privilegiado en alguna película y así poder crecer en su carrera. La academia jamás se expidió al respecto y el silencio impune se cernió sobre todas las víctimas.
En el 2019, quien iba a ser anfitrión del premio más importante de la industria cinematográfica no resisitió al archivo y fueron publicadas duras críticas que él había hecho tiempo atrás. Kevin Hart trató de disculparse pero sus palabras no tuvieron peso y los organizadores del evento decidieron que a partir de ese momento, no habría más anfitriones en la entrega.
La prueba de la entrega de la estatuilla dorada sin conducción de ningún "humorista" que pudiera meter la pata con comentarios racistas o xenófobos fue puesta el año pasado y todo salió muy bien.
El número de audiencia se elevó un 12,9% llegando entonces a ser vista por casi 29 millones de personas, un número muy alto en comparación al año anterior donde la ceremonia tocó el piso más bajo de su historia. Éste año la ceremonia se llevará a cabo el 9 de Febrero. Habrá que ver...
