Ahora sí se pudrió: Meghan Markle no se quedó callada y se cancela todo

La guerra librada contra la Reina Isabel tiene efectos colaterales: en enero Meghan Markle y el Príncipe Harry tomaron la decisión de alejarse de la familia real, pero recién el 31 de marzo será cuando esto se haga efectivo. La Reina Isabel les dio hace semanas el permiso para poder dejar de trabajar para la Corona y dedicarse a los negocios privados, pero con condiciones: la palabra 'royal' es el karma, Meghan no se quedó callada y el gran plan que tenían pensado está a punto de cancelarse.

La Reina Isabel le ha exigido al Príncipe Harry que no usen ninguna nomenclatura relacionada con la realeza en sus nuevos negocios, y si bien junto a Meghan Markle han aceptado de mala gana, se abrió otra polémica familiar ya que no están dispuestos a irse de forma tranquila y lucharán hasta el final por lo que ellos quieren.

A través de un comunicado aseguraban que, a pesar de que acatarán la decisión de Su Majestad, consideran que están siendo víctimas de un agravio comparativo: "Si bien existe un precedente para que otros miembros de la familia real busquen empleo fuera de la institución, para el duque y la duquesa de Sussex se ha establecido un periodo de revisión de 12 meses".

"Según el acuerdo, el duque y la duquesa de Sussex entienden que están obligados a retirarse de los deberes reales y no asumir deberes representativos en nombre de Su Majestad la Reina", explicaban en ese nuevo comunicado.

El Príncipe Harry y Meghan Markle están atacando directamente a las princesas Beatriz y Eugenia de York, quienes trabajan de forma privada pero siguen usando sus títulos y sus conexiones con la realeza: es más, son las hijas del Príncipe Andrés, envuelto en en un escándalo de corrupción.

Se trata de una bomba lanzada contra las primas reales a quienes Meghan Markle no había frecuentado demasiado mientras que el Príncipe Harry sí se llevaba bien: de hecho, habían sido invitados a la boda de Beatriz de York para morbo de los paparazzi, pero ahora todo indica que no asistirán al cónclave ni mucho menos a la fiesta después de la ceremonia.

Queda claro que Meghan Markle ya no se calla nada y que al propio Príncipe Harry no le importa para nada desvincularse por completo de los Windsor: con el Príncipe William y Kate Middleton la relación es nula, ya que reconoció en aquel polémico documental grabado en África que estaban distanciados.

Además, al Príncipe William no le ha gustado nada los últimos pasos que han dado el Príncipe Harry y Meghan Markle. Y ahora Beatriz y Eugenia de York no la pasan nada bien luego del el comunicado en un momento tan complicado como el que están pasando con todo el escándalo de su padre, el príncipe Andrés. La guerra recién comienza.