REALEZA
Ya no lo oculta: la dolorosa situación que atravesó en el último viaje la Reina Máxima
Pedido oficial de perdón.
La sonrisa habitual y espontánea es la firma y sello distintivo de la Reina Máxima, pero esta semana ha vivido una situación dolorosa, inevitable y fue a través de un acto con tintes de reparación histórica contra un país sufrido como Indonesia donde los Países Bajos han sido responsables de muchas vidas perdidas.
Luego de impactar a todos con su estilismo único y elegante, combinando prendas retro con accesorios de una verdadera royal, la sonrisa desapareció de la Reina Máxima cuando acompañó al Rey Guillermo por la actuación de parte del Ejército holandés durante la Guerra de Independencia de su antigua colonia entre 1945 y 1949.
"En consonancia con las declaraciones anteriores de mi Gobierno, me gustaría expresar mi pesar y disculparme por la violencia excesiva por parte de los holandeses en aquellos años", dijo el Rey Guillermo acompañado de la Reina Máxima visiblemente consternada por los sucesos ocurridos.
El Rey Guillermo y la Reina Máxima fueron recibidos por el presidente de Indonesia, Joko Widodo, en el palacio de Bogor: luego de desinfectarse las manos con alcohol en gel ante los temores por el coronavirus, Guillermo profundizó su discurso de perdón: "Pido perdón con la completa conciencia del dolor y la pena que las familias afectadas siguen padeciendo hoy".
El Gobierno de Holanda había pedido formalmente perdón a los familiares de los fallecidos en la Isla de Java en 1947 por el entonces Ejército colonial en la lucha por la independencia de Indonesia. Fallecieron más de 200 indonesios en Célebes y a otros 430 en la aldea de Balongsari. El Rey Guillermo y la Reina Máxima han expresado sus disculpas luego de las denuncias ante la ONU y la nula condena a ningún soldado holandés.
El Estado holandés fue condenado a pagar 20.000 euros de compensación a cada demandante víctima de las acciones del ejército holandés. Holanda transfirió el dinero de la compensación a los abogados para que lo distribuyan entre las víctimas, pero faltaba un gesto como el realizado por el Rey Guillermo y la Reina Máxima.
Se trata de una faceta de la Reina Máxima que no ha dejado de mostrar durante su visita a Auschwitz a 75 años del Holocausto ni en el fallecimiento de su padre o su hermana. La Reina no oculta sus emociones en tiempos difíciles que contrastan con los buenos momentos vividos durante su extensa gira por el sudeste asiático. Se trata de una gira que este viernes llega a su fin.
