El drama vuelve a golpear las puertas del Príncipe William y Kate Middleton

Cada historia de vida es única, pero lo que le ha pasado al Príncipe William y a Kate Middleton no ha sido fácil: tantas vidas perdidas, tanto encierro, tantas escenas difíciles de ver inevitablemente los remontan a los momentos más complicados que les han tocado vivir. Perder a la madre como es el caso de William es uno de los mayores dolores que alguien puede vivir. Basado en su propia experiencia, ha compartido lo que vive.

Junto a Kate Middleton, el Príncipe William ha querido transmitir cuatro consejos basados en su propia experiencia personal lo que ha vivido ante lo tan temido: "Respira: si una situación te sobrepasa, detente y respira. Respira 10 veces para bajar la ansiedad y recuperar la tranquilidad", fue el primer consejo.

"Establece unas horas de relax: es importante es estar activo y también relajarse. Elige al menos una hora a la semana para relajarte por completo y dejar tus actividades al diario", es el segundo consejo que ha brindado al pueblo británico el Príncipe William, quien perdió a Lady Di en 1997.

"Duerme: un sueño reparador es fundamental para comenzar el nuevo día con vitalidad y energía. Crea una rutina antes de dormir y deja de lado el celular a un costado antes de meterte a la cama", señaló el Príncipe William junto a Kate Middleton, en una de las acciones que más han conmovido a los ciudadanos.

Por último, el Príncipe William ha querido decir: "No seas duro con vos mismo. El estrés nos hace más críticos: debemos recordar que tenemos que ser amables con nosotros mismos. Piensa unos minutos para pensar lo que has conseguido y todo lo positivo que has hecho".

Estos cuatro pasos para convivir con uno mismo y con las personas que compartan la cuarentena ha sido revelador de parte del Príncipe William y Kate Middleton: lo hicieron desde su residencia en Sandringham, en Anmer Hall, el día después de que se anunciara el positivo del Príncipe Carlos y hoy mismo el mismo resultado del primer ministro Boris Johnson.

El fallecimiento de la princesa Diana de Gales, cuando era solo un niño, ha llevado al Príncipe William a luchar y visibilizar la ansiedad, el estrés y la depresión, una lucha que ha compartido con su hermano Harry: los duques de Cambridge volvieron a mostrar su costado más humano.