Peor que Meghan Markle: la mujer que hizo llorar a mares a la Reina Isabel

Ni Lady Di ni Camilla Parker Bowles ni Meghan Markle: la Reina Isabel ha atravesado todo tipo de situaciones, dramas y secretos en sus 94 años cumplidos este martes, pero pocas mujeres le hicieron padecer tanto como quien acaba de revelar lady Pamela Hicks, quien más ha seguido tan de cerca la vida de Su Majestad.

Longeva como la Reina Isabel, Hicks tiene 91 años y es nada más y nada menos que la prima del Duque Felipe de Edimburgo y fue la antigua dama de compañía de la Reina: aristócrata y voz siempre dispuesta a hablar de Su Majestad, Hicks ha comenzado a desvelar secretos bajo siete llaves.

Imaginemos por un segundo todo lo que ha visto en primera persona la dama de compañía de la Reina Isabel: con cuántas personas cercanas a Su Majestad ha tratado durante sus 68 años de reinado y quiénes han sido las personas que más la hicieron sufrir en toda su vida.

India Hicks es la hija de Pamela Hicks y es quien ha presentado una nueva entrega del podcast realizado a su madre donde revela misterios y secretos por parte en torno a la vida de la Reina Isabel: su vida en la corte británica, sus amistades, sus enemistades y una persona muy especial: su suegra.

Se trata de la madre de Felipe de Edimburgo, la princesa Alicia de Battenberg, quien se mudó al palacio de Buckingham donde vivió hasta sus últimos días. Hermana del famoso Louis de Battenberg, último virrey de India, Alicia fue la suegra más complicada que le podría haber tocado a la Reina Isabel.

"¡Claro que la conocí! ¡Y muy bien! Era todo un personaje. Pero al ser sorda era una persona muy difícil. Si bien podía leer los labios, no podía hacerlo mientras hablaba más de una persona a la vez. Si estaba en una gran cena, no podía evitar sentir que todo el mundo estaba hablando de ella", explica Hicks, en referencia al malhumor constante de la suegra de la Reina Isabel, famosa ahora por su interpretación en The Crown.

"Podía ser muy difícil: una vez en el castillo de Windsor en la que estábamos esperando para comer, vino un lacayo para acompañar a la princesa Alicia a comer con la Reina Isabel. El joven era nuevo en el puesto, tendría unos 20 años, y como estaba nervioso pensó que tenía que entretenerla: '¿Qué ha estado haciendo esta mañana, señora?', le preguntó. '¿Y a ti eso que te importa?', le retrucó la princesa Alicia", relata Hicks.

Luego de varios años de convivir con ese carácter y constante malhumor, la Reina Isabel hizo prédica de su paciencia ejemplar y logró calmar las irrupciones de su suegra, convirtiéndose en responsable directa de su bienestar en todos los aspectos de la vida maravillosa que llevó mientras estuvo viviendo bajo su techo: "La Reina siempre se las arregla para sacar lo mejor de la gente", concluyó Hicks. Por algo es Su Majestad.