Romina Manguel recordó el fuerte cruce que tuvo con Feinmann: "Me pasaron mil cosas por la cabeza"
La presentadora comentó qué sintió en ese momento.
Corría el año 2017 cuando se vivió uno de los momentos más incómodos en la televisión argentina, y este fue protagonizado por Romina Manguel y Eduardo Feinmann en el programa "Animales Sueltos".
La discusión que tuvieron la periodista y el abogado fue un hecho reseñado por todos los medios de comunicación del país y ahora, tres años después, ella revela qué cosas pasaron por su cabeza en el fuerte cruce.
"Hasta ese momento en el que viví esa situación con Feinmann no tenía nada malo para decir de él, pero ese día me calló al aire, me hizo 'chist'. Y en ese momento, me pasaron mil cosas por la cabeza", confesó Manguel en el podcast "Basta chicos".
Sin embargo, la argentina optó por transmitir un mensaje contra el machismo y la falta de respeto, y dejó saber su incomodidad en vivo, lo que causó mucho ruido en el medio.
"Por un lado, pensé: 'no quiero un quilo... y salir en todos los medios por esto'; y también pensé en mis hijas, que hoy tienen 9 y 12 años. Y también en un montón de mujeres y de hombres, que sienten que la tele es como 'sacra' y si yo lo dejaba pasar y decía 'bueno está bien, qué feo estuvo', quizás no les iba a parecer tan grave que mañana les tiren un diario por la cabeza, por ejemplo...", dijo Romina.
Además, la locutora dejó saber su enfática opinión sobre la acción de Feinmann: "¿Qué es eso de chistar así? ¿Soy un perro? Ni a mis hijas les hice eso nunca. Es para alguien a quien considerás 'inferior'. Ahí me planteé que eso no podía seguir, pero de una manera muy dura, con mucho escándalo y costo para mí. Nunca está bueno estar en el medio de la tormenta y que todos los ojos te estén mirando y juzgando...".
Sobre lo que la impulsó a no dejarse pisotear por su compañero de trabajo, la comunicadora social dijo: "Yo pensaba que por ahí el día de mañana, si a otra mujer alguien la chista iba a ser más cómodo decir 'esto no'. O por ahí, quizás estoy pensando muy en grande, pero no se animan directamente a chistar que es lo que a mí me gustaría. Siento la responsabilidad de que, quizás, lo que uno haga puede repercutir y eso me importa un montón".
