DEL MAS ALLÁ

Escalofriante: cómo fueron las experiencias paranormales que le tocaron vivir a Sofía Zamolo

Desde hace años, Sofía Zamolo tiene charlas con familiares que fallecieron.
viernes, 5 de noviembre de 2021 · 02:00

Con imágenes que le resonaron por largo rato, Sofía Zamolo inició un diálogo con un pariente fallecido y eso le provocó un escalofrío y, a la vez una emoción, que difícilmente olvidará.

Tal fue la experiencia que la modelo de Multialent narró en una de las emisiones del programa “Incorrectas”, que conducía Moria Casán. En dicha oportunidad, Sofía Zomolo recordó momentos del pasado y una frase que fue el inicio de una experiencia paranormal.

Fueron varias las historias que se contaron en el programa pero la que narró Sofía Zamolo tenía mucho de dramatismo ya que se vinculaba con uno de sus familiares más queridos.

Tras la experiencia vivida, cuenta que despertó con un llanto muy fuerte.

En esa oportunidad, la actriz y conductora argentina relató el momento que vivió años atrás y que involucró a su familia. Tal como mencionó Sofía, su abuela leía las cartas y la borra de café. Pero, cuando se enfermó una persona muy querida, dejó de hacerlo.

El hecho ocurrió en la casa familiar. “El cuarto de mi papá estaba al lado del de mi abuela, y en otra parte de la casa había una pared llena de platos ingleses colgados. En un momento, se caen todos los platos de esa pared”. Ante este suceso, el padre de Sofía Zamolo se despertó repentinamente y le dijo a su mujer que fuera a ver cómo estaba Muti, la abuela. “Cuando llegó, mi abuela estaba con un infarto. Ahí llamaron al médico, no pudieron hacer nada”.

Tras el nacimiento de su hija asegura que recibió distintos mensajes del más allá. 

 

Sofía Zámolo y los que no están

Según manifestó Sofía, su padre se comunica con ella en sueños. “Falleció hace diez años, hablo con él y me despierto con su perfume. He soñado cuatro veces”.

Cuando su padre estaba vivo también tenía percepciones de personas fallecidas. 

Además, aclaró que a los cuatro meses de su fallecimiento se despertó con una hermosa sensación. Él estaba sentado en la casa de la infancia y le decía: “por favor, te lo pido, no llorés más. Yo estoy bien”.