Cuáles son los secretos para que los recipientes herméticos queden limpios e impecables

Los recipientes herméticos se convirtieron en uno de los productos indispensables de cualquier ser humano. No solo porque son la forma más práctica e higiénica para la conservación, sino, además, porque son ideales para llevar el almuerzo al trabajo.

Más allá de todas sus bondades, es imprescindible que estos envases de almacenamiento cuenten con una correcta y frecuente medida esencial de higiene. La recomendación es que no solo hay que limpiar los recipientes herméticos en cada ocasión, sino utilizar determinados productos.

Por un lado, hay que tener en cuenta que la limpieza básica de estos recipientes herméticos es sencilla y debe hacerse lo antes posible una vez que se termine de usar. Es fundamental que no tenga por mucho tiempo restos de comida.

Lo primero que se debe hacer con estos potes de plástico es repasar con una servilleta para eliminar, en lo posible, pequeñas partículas y, también, líquidos o grasa que haya quedado pegada.

Otro de los recursos que se puede usar es pasarle un trapo de cocina humedecido con una gota de lavavajillas. No habrá que olvidar pasarle también a las dos caras de la tapa. Una vez enjuagado el trapo, volver a pasar.

Aunque esto es la forma elemental, también hay que tener en cuenta que habrá que realizar una higiene más profunda cuando presente zonas manchadas o con alteraciones en su color original.

Últimos recursos

La primera manera de limpiar estos recipientes herméticos es pasarle una servilleta seca y un trapo, porque así se evita la proliferación de microorganismos y, también, para que los alimentos tengan menos chance de dejar su huella.

Cuando las cosas ya nos inevitables, se deberá usar bicarbonato y vinagre. Habrá que mezclar una cucharada grande de bicarbonato con un poco de agua y hacer una pasta por un lado. El vinagre es otra opción por sus propiedades blanqueantes y anti bacterianas.