CON ESTILO

Así es la fastuosa chacra donde Julieta Prandi disfruta de su amor con Emanuel Ortega

La casona que suele visitar la conductora se encuentra a 70 kilómetros de la capital argentina.
viernes, 1 de abril de 2022 · 20:00

Tras atravesar una sucesión de situaciones traumáticas, Julieta Prandi disfruta de un amor pleno junto a su pareja, Emanuel Ortega. Durante la pandemia, y cada vez que pueden, se alojan en una espectacular chacra que la familia del cantante tiene en Luján.

En medio de un enfrentamiento judicial con su expareja, Julieta Prandi descansa junto a su actual amor en un campo en los alrededores de Buenos Aires. La casona que la conductora visita junto a sus hijos tiene capilla propia, estudio de grabación y gran superficie de verde.

El horizonte y el amanecer es el paisaje que Julieta elige para hacer su rutina de ejercicios. 

La casa rural donde Julieta Prandi acostumbra tomarse algún descanso está a 70 kilómetros al oeste de Buenos Aires y fue adquirida por Palito Ortega hace varios años. Fue él mismo quien se ocupó de plantar los árboles que rodean a la vivienda y los del camino de ingreso.

Tras siete duros años, finalmente refaccionaron la propiedad que incluye un espacio destinado a un estudio de grabación, donde trabajaron los más afamados artistas argentinos. La excompañera de Gerardo Rozín disfruta de los espacios al aire libre.

En el primer otoño de la pandemia, Julieta se alojó en la estancia. 

En el campo dedicaron un rincón para la construcción de una capilla. En ese espacio Julieta Ortega se casó con Iván Noble y fue allí donde también algunos de los nietos de la popular pareja fueron bautizados.

Entre los principales atractivos para la actriz y conductora, más allá de la compañía de su amado, está el hecho de que en ese lugar hay caballos que son criados para la práctica de polo. Julieta se mostró feliz en cada oportunidad en que visitó el lugar.

Los animales que hay en la chacra son de los preferidos de la conductora. 

 

Familia ensamblada

Recientemente, Julieta Prandi contó que tomaron la decisión de dejar de verse algunas veces a la semana y que tanto ella como sus hijos estuvieron de acuerdo en que había llegado el tiempo de dar un paso y convivir.

Del romance inicial, ahora ya conforman una pareja consolidada que, además, convive. 

“Nos llevamos muy bien con los suyos y los míos, no tenemos los nuestros, solo adoptamos dos perros que fuimos a buscar a Córdoba: dos bullmastiff, se llaman Bestia y Apolo”, contó Julieta en una entrevista.

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