Ana Rosenfeld no se calló nada: reveló detalles del problema que vive

Siempre activa y con muchas amistades que la acompañan, Ana Rosenfeld atraviesa un duro trance por el fallecimiento de su esposo, Marcelo Frydlewski, y también por la polémica que surgió de parte de algunas exclientas de su estudio.

“Estoy enojada con la fe porque pedí por su vida y nadie me escuchó”, sostiene la letrada mediática, quien ahora también es parte de "LAM". Ana Rosenfeld no pierde oportunidad de contar cómo cambió su vida tras el adiós a su “amorcito”.

Tal como contó en una reciente entrevista que realizaron en Infobae, Ana Rosenfeld se sinceró y admitió que estar sin él le pesa muchísimo y que, tras la muerte de Marcelo, cena en la cama para sentirse menos sola.

La panelista del programa de Ángel de Brito se mostró muy golpeada tras quedar viuda y, en cada emisión del ciclo de América, relata algún nuevo dato de su vida actual, como que tuvo que aprender las cosas que habitualmente resolvía su marido.

Aunque continúa activa en casos como los de Wanda Nara, Luciana Salazar o Victoria Vanucci, admitió que está muy ocupada: “El programa termina a las 10 de la noche, llego 10 y media a casa, me saco la ropa, me saco el maquillaje y me preparo la cena”.

Además reconoció que le cuesta vivir sin él: “Me acuesto mirando su foto. Encima los celulares todo el tiempo te están mostrando lo que sucedió ese día en años anteriores, así que apenas me despierto, prendo el teléfono y me salta alguna foto vieja”.

El dolor y la fe

Ana Rosenfeld es una mujer fuerte y por eso admite que la única forma de superar su dolor por el fallecimiento de su esposo es el trabajo. “No lo voy a resolver con un terapeuta. Lo resuelvo con mi vida cotidiana”, dijo.

“Estoy descreída de todo, porque cuando pedí mucho mucho, Dios no quiso. Más allá de que toda la vida fui de creer y de tener mucha fe, todavía no tuve contacto con la explicación de por qué Marcelo no está”, manifestó la letrada.