LIMPIEZA
Trucos para dejar limpios e impecables los vidrios y los espejos
La higiene del hogar es básica para estar en armonía y no tener enfermedades.Para mantener la limpieza de la casa, es indispensable estar atentos a todos los detalles. No solo pasar el escobillón para sacar el polvo y darle brillo a los muebles, sino también tratar de que los vidrios y los espejos estén impecables.
Los expertos en la limpieza del hogar sostienen que, para esta tarea son imprescindibles algunos artículos fáciles de conseguir y que además requiere de ciertos pasos. El aseo de esta parte de la casa ayuda a la imagen en general.
Uno de los elementos que se necesita para la limpieza de los vidrios es un trapo especial de microfibras que captan la suciedad. También se pueden usar los que son de poliéster o de poliamida.
El otro de los productos necesarios para una correcta higiene de las ventanas es el limpiacristales que para algunos es esencial, ya que con este se logran excelentes resultados. También se precisará papel de diario, el cual es el mejor material para secar y que no queden marcas.
También se puede usar el secador de goma que sirve para pasar por la superficie una vez que se limpió y quedó húmeda. De este modo quedarán bien secos y relucientes. No debe pasarse de cualquier modo, sino que debe hacerse en ambos sentidos.
Aunque a veces se espera un día soleado para hacer esta tarea, pero lo cierto es que es contraproducente. El mejor día para hacerlo es si está nublado y sin viento y, si es posible, a una hora en que la luz no incida de forma directa sobre las ventanas.
Los marcos también importan
Si la ventana es de PVC o si los cerramientos son de cristal, la limpieza del marco es una tarea que no puede faltar. Se deberá utilizar un paño húmedo con un poco de detergente. Se recomienda espolvorear talco, una vez al año, en las gomas que sujetan el cristal para que no se sequen.
Otra forma de lograr la limpieza de los cristales es con un método casero. Habrá que verter en un vaporizador una parte de vinagre blanco por tres de agua caliente y añadir unas gotas de limón. Luego se deberá frotar con papel de diario y quedarán impecables.