Cuál es el hábito que hay que erradicar para evitar que las bacterias entren a nuestro hogar

Actualmente, en muchos hogares se adoptaron varias costumbres que, antes de la pandemia, hubieran resultado totalmente raras. Sin embargo, tras el cuidado de la salud, ahora nadie deja de lavarse las manos ni llevar alcohol en gel en la cartera.

Más allá de estos hábitos, hay uno que los especialistas en higiene del hogar consideran básico y que es quizás el que más se deberá erradicar. Una costumbre que debería desterrarse es usar los mismos zapatos para la calle y para estar en nuestra casa.

El consejo que dan los profesionales es elemental. En la calle, la suela de nuestro calzado queda contaminada de suciedad, bacterias y otros elementos que pueden ingresar a nuestro hogar causando todo tipo de infecciones.

Aunque para algunos todavía es una costumbre exótica, es imperante para la limpieza de nuestra vivienda asimilar el hábito de dejar el calzado en la puerta y cambiarlo por otro más cómodo y libre de suciedad para ingresar.

Según un estudio de la Universidad de Arizona, solamente en la parte exterior de los zapatos hay 421.000 bacterias. En tal caso, si se camina con los zapatos que uno trae de la calle se corre el riesgo de pasarlo a las superficies internas.

Estos microorganismos pueden tener escasas probabilidades de generar algún tipo de problema en personas sanas. Lo grave es que aumenta el riesgo de enfermedad en personas con sistemas inmunitarios debilitados o en hogares con nenes o mascotas.

Limpieza y comodidad

Sacarse los zapatos al entrar al hogar no solo es un hábito saludable que no implica ningún esfuerzo, sino que además permite estar más cómodos y liberarse del calzado que nos tuvo a mal traer durante la jornada laboral.

Los profesionales de la decoración recomiendan instalar un zapatero en el recibidor. De esta forma, los zapatos no tocarán nunca el suelo. Se aconseja tener separados aquellos que se utilizaron de los que no.