Receta
Jacobos de jamón y queso: el paso a paso de esta receta crujiente para las picadas del finde
Disfrutá de preparar este platillo internacional en poco tiempo y sorprender a todos con el resultado.
Si vas a pasar el fin de semana con amigos o con tu familia de una forma distendida, cocinar unos Jacobos de jamón y queso para sumar a la picada es una de las ideas más sabrosas y divertidas, ya que se trata de un plato tradicional muy fácil de preparar y que a todos les gusta.
El Jacobo de jamón y queso se hace tradicionalmente con jamón cocido o con jamón serrano. El emparedado crocante que se logra gracias al rebozado que se le da es clave para hacer de esta receta una de las mejores que se haya probado antes. Seguí el paso a paso para cocinarlos en casa.
Ingredientes
- 250 g de jamón cocido o serrano en finas fetas.
- 250 g de queso gruyere o tybo en finas fetas.
- 4 huevos.
- Pan rallado c/n.
- Harina c/n.
- Mostaza y pimienta a gusto.
- Aceite para freír.
Modo de preparación
- Antes que nada, partí los huevos y batilos en un bowl con una mezcla de mostaza y pimienta para darles un toque extra de sabor. Reservá. Prepará en una bandeja el rebozador de tu preferencia, puede ser pan rallado, copos de maíz triturados, panko o lo que más te guste. En un plato hondo, tamizá la harina que será necesaria para formar parte del rebozado de los Jacobos de jamón y queso.
- En un plato playo, disponé dos lonchas de jamón, una encima de la otra, y luego añadí dos fetas de queso. La receta original lleva queso gruyere, pero podés usar el que tengas. Doblá por la mitad para formar una especie de paquete y pasá el Jacobo por harina, después por huevo y por pan rallado.
- Repetí el proceso del rebozado de nuevo: primero, harina, huevo y pan rallado. Esta segunda vuelta es necesaria para evitar que en la cocción los Jacobos de jamón y queso se abran. Hacé esto con todos los que tengas hasta terminar el fiambre.
- Cociná en abundante aceite caliente o en la freidora de aire. Retiralos cuando su corteza esté dorada y servilos al plato con ensaladas o como parte de una picada.
Tené en cuenta que podés cocinar este plato español de distintas formas, por ejemplo, hacer mini Jacobos o dales una forma triangular. Todo queda a la imaginación de quien cocina.
