Suculentas: consejos para tener una rosa del desierto florida durante el verano

La variedad de suculentas es tan amplia que hay muchas posibilidades para cada uno de los gustos de los fanáticos de estas plantas. Entre ellas, la Rosa del desierto o adenio que es una de las más pintorescas por su forma y porque ofrece una bellas flores.

Esta suculenta lleva como nombre científico Adenium obesum y es originaria del este de África y sur de Arabia. Es una crasa ideal para el exterior a pleno sol y también puede ir en ambientes interiores, pero cerca de una ventana.

La principal característica de esta suculenta es que, al ser un arbusto, logra cierta altura y tiene unas flores muy hermosas de color rosa, aunque también pueden ser de color rojo o blanco. Su crecimiento es lento y su tallo grueso la asemeja a un pequeño árbol.

Entre los principales atractivos de esta planta carnosa es su tronco que aumenta de tamaño no solo a lo alto sino también a lo ancho. Esto se debe a que tiene una función: hace de reserva de agua.

Por su parte, sus hojas son ovaladas y pueden medir entre 9 y 11 centímetros de largo y son bastante resistentes. Lo recomendable es, sobre todo en verano, ubicarla en algún sitio que tenga pleno sol para que crezca correctamente.

Nunca debe estar en lugares sombríos y debe cuidarse mucho durante el invierno porque no tolera bien las temperaturas muy bajas, en esos meses, tendrá que estar más tiempo al sol.

Problemas a tener en cuenta

Uno de los problemas que puede tener esta suculenta es si se la riega en exceso, por lo cual se recomienda hacerlo con moderación, sobre todo, durante su crecimiento. Es suficiente regarla cada 10 o 15 días.

Puede florecer hasta dos veces durante el verano y en invierno puede perder hojas, pero no hay que asustarse porque las recuperará en primavera. En maceta puede alcanzar los 60 centímetros de altura.