Torta frita sin grasa: la receta más rica, fácil y con pocos ingredientes, para comer sin culpas

La torta frita es una de las recetas favoritas a la hora de la merienda, pues al tener su origen en Argentina, es un complemento ideal para tomar con el mate. Además, la preparación se puede adaptar para que sea sin grasa y así poderla comer con más frecuencia.

Para hacer este tipo de torta no es necesario tener muchos ingredientes y solo nos llevará unos minutos preparar varias porciones para compartir. Por eso, la torta frita es una de las recetas ideales para aquellos días en los que se quiera hacer una comida rápida y en grandes cantidades.

Los ingredientes necesarios para hacer la torta frita:

• 250 gramos de harina de trigo.
• 250 gramos de harina especial de repostería o leudante.
• 1 cucharada pequeña de sal.
• ½ cucharada pequeña de azúcar.
• 1 taza grande (300 ml.) de agua.
• 2 cucharadas de aceite.
• Aceite para freír.
• 150 gramos de azúcar. Se usará para espolvorear una vez cocinadas.

Para hacer la preparación es necesario mezclar los dos tipos de harinas, vértelas en un bowl y tamizarlas para que se aireen. Luego, abrir un espacio en el centro de unos 3 cm de diámetro.

En ese espacio se vierte la cucharada pequeña de sal, la medida más pequeña de azúcar y las dos de aceite de girasol. Además, se debe calentar la taza de agua sin que llegue a hervir. Una vez esté templada, se agrega al bowl con la harina y el resto de los ingredientes.

Al hacer la masa se puede hacer una mezcla con ayuda de una cucharilla y luego con las manos. Una vez se una la harina con el agua es necesario seguir el amasado en una superficie plana. Se hace con movimientos envolventes para que quede homogénea. Este paso se debe hacer entre 10 y 15 minutos.

Luego, se le da forma redonda y se envuelve en papel film. Se deja reposar por 20 minutos. Para hacer los cortes hay que darle a la masa una forma de rulo y luego cortar en porciones pequeñas que tendrán una forma circular.

Esta porción se aplana con la mano y se estira con ayuda del rodillo, sin que quede demasiado fina. Una vez conseguida la forma se abre un espacio en el centro para que la cocción sea más rápida y homogénea.

En un sartén con abundante aceite de girasol caliente se agrega la preparación, la cual se tiene que dorar por ambos lados. Una vez cocinadas se colocan en un papel absorbente y están listas para consumir.