Suculentas
El motivo por el que deberías usar leche para mantener a tus suculentas sanas y fuertes
Este truco será muy agradecido por tus plantas cuando lo pongas en práctica.Las suculentas se han convertido en una de las plantas de interior más queridas en todo el mundo. Con sus formas llamativas, abundancia de especies y facilidad de cuidado, no es de extrañar que se hayan apoderado del mercado.
Sin embargo, al igual que todas las plantas que existen, las suculentas necesitan un riego adecuado para prosperar. Y aquí viene la pregunta: ¿Qué debemos utilizar para regarlas? Pues bien, la leche es una de las respuestas más inesperadas que jamás recibirás. Pero, creenos, ¡funciona!
Actúa como fertilizante natural
El calcio es un nutriente vital que ayuda a construir paredes celulares fuertes. Cuando no reciben suficiente calcio, se debilitan y sus hojas y tallos empiezan a pudrirse. Utilizar leche como abono no sólo aportará los nutrientes esenciales, sino que también equilibrará el pH del suelo y lo hará más alcalino.
Protege contra plagas y enfermedades
Los ácidos grasos, las enzimas y los nutrientes presentes en la leche actúan como insecticida y fungicida natural. Estas propiedades antibacterianas protegen a las suculentas de enfermedades fúngicas comunes como el oídio, el tizón y la roya. También ayuda a repeler insectos como la araña roja, los pulgones y las cochinillas, que se alimentan de las hojas.
Es un hidratante natural
Aunque las suculentas están adaptadas a almacenar agua en sus hojas y tallos, siguen necesitando la cantidad adecuada de humedad para prosperar. La leche tiene propiedades hidratantes que ayudan a unir las moléculas del líquido a las células vegetales. Esto garantiza que las células de la planta se mantengan hidratadas, regordetas y sanas, evitando que se sequen.
Mejora el drenaje del suelo
Las suculentas odian el agua estancada, y demasiada puede provocar la pudrición de las raíces y otras enfermedades. La leche mejora el drenaje del suelo, permitiendo que el exceso de agua pase fácilmente a través de él. Esto ayuda a prevenir la compactación del suelo y favorece el crecimiento sano de las raíces.
Cómo regar las suculentas con leche
- Mezcla una parte de leche con dos partes de agua.
- Agítalo bien y ponlo en una botella pulverizadora.
- Rocía la solución de leche sobre las hojas y la tierra de la suculenta, evitando las raíces.
- Hazlo una vez al mes durante la temporada de crecimiento (de primavera a otoño)
- No utilices la leche en crasas que crezcan en el exterior bajo la luz directa del sol.