Curiosidades y cuidados de la suculenta rosa negra, una de las plantas más raras y hermosas

La suculenta rosa negra es una de las plantas más delicadas pero que suma armonía y belleza al espacio en el que se coloque. Además, al ser una de las especies más raras, requiere de cuidados especiales para que se mantenga sana y pueda perdurar por más tiempo.

Este tipo de planta se caracteriza por tener un cuidado determinado, que la hace ideal para aquellas personas que no pueden dedicar mucho tiempo a su jardín. La suculenta rosa negra se reproduce de manera sencilla y necesita un regado en un lapso de tiempo amplio.

Originalmente, este tipo de suculenta surgió en las islas Canarias, donde florece con un tono amarillo en el invierno. Ciando se exportó a México, comenzó a utilizarse como decoración en casas y restaurantes junto a otras que forman parte de su familia.

Su nombre rosa negra está inspirado en el parecido que tiene con la flor, pues sus hojas se caracterizan por ser levemente encorvadas, pero no llegan a enrollarse entre sí. Además, en el verano se abren para recibir más luz solar.

Consejos para cuidar la suculenta rosa negra

Para no oscurecer demasiado sus hojas, lo recomendable es no dejarla mucho tiempo al sol, sino por periodos cortos al día. En caso de no querer que tome este tono, es necesario dejarla en la sombra y que no reciba la luz solar de manera directa.

Para el sustrato lo mejor es preparar la arena, así la planta pueda absorber la mayor cantidad de agua posible. Para ello, es preferible utilizar uno de coco, que permitirá que el líquido baje hasta la raíz y no se quede estancado en la superficie.

Durante el verano y la primavera es esencial regarla cada dos o tres días, pero en invierno basta con hacerlo cada dos o tres semanas. En medio de esta estación fría, la suculenta tiende a florecer, por lo que es necesario limpiar las hojas con alcohol para abrirlas y destapar sus poros, lo que le permitirá tener más flores.