Oreos caseras
Oreos caseras: en pocos pasos, la receta económica y sencilla de las galletitas más ricas
Las galletas en cuestión podrían elaborarse en menos de 50 minutos.Por lo general, existen muchos productos o alimentos que las personas compran en las tiendas sin saber que estos pueden elaborarse perfectamente en el hogar. Tal es el caso de las Oreos caseras.
Si querés preparar dos docenas de estas deliciosas galletas, entonces, para la masa buscá 100 g de azúcar, 1 huevo, una cucharada de vainilla, 140 g de harina 0000, 35 g de cacao (amargo y negro o marrón), una cucharadita de polvo para hornear o bicarbonato y una pizca de sal.
Después, para el relleno de las Oreos caseras vas a necesitar 50 g de manteca pomada, 60 g de azúcar impalpable, una cucharadita de vainilla y 3 cucharadas de leche en polvo.
Cómo preparar las oreos
En principio, tenés que derretir la manteca que vas a usar para la masa de las Oreos y el líquido lo vas a vertir en un bol mediano y resistente. Luego, vas a sumar el huevo, la vainilla y el azúcar.
Cuando los ingredientes ya estén dentro del bol, mezclá todo muy bien con un utensilio de madera durante dos o tres minutos, aproximadamente.
Finalizado el proceso, vertí el cacao negro, la harina y el polvo para hornear. En este punto, podés usar el utensilio de madera para unir los ingredientes, pero lo cierto es que el proceso se hará más fácil si lo hacés con la mano.
La idea es unir todo hasta que quede una masa homogénea. Cuando obtengas dicho resultado, empezá a estirarla con la ayuda de un rodillo para que, posteriormente, puedas meterla a la heladera unos 10 minutos.
Después, cortá las capaz de las Oreos con un molde, las ponés en una placa y metés todo al horno por unos 15 minutos. Finalizado el proceso, sacá el postre del horno y dejalo enfriar.
El proceso final
Para completar la elaboración de las Oreos caseras tenés que hacer el relleno. Primeramente, buscá un procesador eléctrico y allí vas a mezclar la manteca, el azúcar, la vainilla y la leche requerida al principio de la nota.
Luego, vas a procesar todo muy bien hasta que quede blanca y puedas meterla en una manga pastelera. Si ya completaste ese paso, entonces, buscá una capa de la oreo, sumá el relleno y poné otra capa arriba.
Por último, pero no menos importante, este medio te advierte que dicho proceso deberás repetirlo una y otra vez hasta que se acaben las capas de las Oreos caseras y, cuando eso pase, podés consumirlas con un delicioso vaso de leche.