Beto Casella y un duro golpe para El Nueve

Desde hace varios meses, Beto Casella empezó un duro enfrentamiento contra las autoridades de El Nueve debido a los problemas económicos que tiene el canal (que lo llevaron a atrasarse con los sueldos de sus empleados). Incluso, las autoridades tuvieron que tomar drásticas medidas y cancelar algunos ciclos.

Semanas atrás, el animador radial, en solidaridad con sus colegas, se ausentó de algunas emisiones de su show, “Bendita TV”, como medida de fuerza para tratar que la situación se resuelva. A pesar de que, desde hace un tiempo, Beto Casella regresó al programa, en la edición de ayer dejó claro que está muy lejos de limar asperezas con el canal del Grupo Octubre.

Al comenzar el clásico magazine de actualidad y entretenimiento, Beto Casella bromeó con la ausencia de una de sus históricas panelistas, Edith Hermida: “¿Sigue sin venir Edith? A mí lo último que me dijo fue: ‘La verdad que para venir a 'Bendita' me voy al teatro, que gano mucha más plata’”, lanzó filosofo el conductor televisivo. Y cerró muy picante: “Más que acá (por 'Bendita') gana cualquiera”.

La dura opinión de Beto Casella sobre “Gran Hermano”

Luego del mal momento que atravesó uno de los exparticipantes, Maxi Guidici, quien generó mucha preocupación entre sus colegas, amigos y familiares, Beto Casella fue entrevistado por “Socios del Espectáculo” y analizó la dura realidad a la que se enfrentan los hermanitos una vez que salen de la casa. El presentador de El Nueve expresó: “Independientemente del caso de Maxi, es el caso de una generación de pibes cuyo máximo horizonte de felicidad parece ser la tele. Él fantaseó con que se quedaba en la tele para siempre. Estaría bueno que tenga variantes y que, si no se da en la tele, busque la felicidad en otro lado”.

El animador radial continuó: “Hace veinte años que estamos viendo que cuando salís de esa casa quedás en un limbo, según el cual sos famoso, te piden selfies, firmás autógrafos, pero al mismo tiempo por ahí no tenés platita, ni laburo, sos un desocupado. Estás como en el medio de que no sabés bien qué sos, quién sos y genera una mezcla de decepción, frustración y confusión, que debe ser difícil de sobrellevar”. Y concluyó: “Hay que entenderlos, son pibes que por ahí todavía están pensando su vida y su futuro. Pero tampoco esta cosa de que la tele es una picadora de carne, los usa y los tira, la TV nunca fue un centro de rehabilitación”.