Trucos de limpieza
No lo vas a creer: el secreto de las abuelas para eliminar las manchas amarillas de tu baño en minutos y sin fregar
Esta fórmula casera es súper efectiva, económica y fácil de poner en práctica para una limpieza profunda.
¿Ya intentaste con productos caros y no sabés cómo sacar esas desagradables manchas amarillas de tu baño? No lo vas a creer, pero podés probar con este económico truco de limpieza que usaban las abuelas y emplear la misma fórmula secreta que ellas para eliminar toda la suciedad de una buena vez.
Todo indica que podrás dejar tu baño brillante con este método casero y aplicar esta preparación en el lavamanos, ducha, bañera, inodoro y/o azulejos. Dicho de otra manera, esas manchas amarillas saldrán en minutos y sin tener la necesidad de fregar con fuerza gracias al accionar del poderoso quitamanchas.
Materiales a utilizar:
- 4 cucharadas de bicarbonato de sodio.
- El jugo de 2 limones.
- 2 cucharadas de detergente.
- 2 cucharadas de pasta dental.
- Recipiente mediano y esponja.
- Paño de microfibra.
Los expertos en tratamientos alternativos de limpieza desvelaron que el bicarbonato de sodio sirve para limpiar diversas superficies, eliminar manchas amarillas difíciles y destapar cañerías. Por su parte, el ácido del limón actúa como un gran quitamanchas y garantiza resultados increíbles. La combinación de ambos compuestos, sumado a la pasta dental y el detergente, promete una perfecta higiene en tareas del hogar (como esta). ¡Haz la prueba en tu baño ya mismo!
Cómo crear y aplicar esta fórmula secreta para eliminar las manchas amarillas de tu baño con mayor facilidad:
- En un recipiente mediano, colocá las cantidades de los ingredientes indicados en el listado de arriba y mezclá muy bien estos compuestos hasta formar una consistencia uniforme.
- El paso siguiente es tomar una esponja, untarla con tu fórmula secreta y pasar dicho quitamanchas sobre las superficies con manchas amarillas. Dejá actuar unos 30 minutos aproximadamente.
- Pasado este tiempo, tenés que enjuagar con abundante agua e ir quitando el producto con la ayuda de un paño de microfibra. ¡Listo, es en este momento cuando descubrirás la magia y adiós manchas amarillas!
