PLANTA NATIVA
La planta nativa que florece en esta época y que es ideal para crear los cercos más hermosos en tu jardín
Esta especie es ideal para llenar tu jardín de color sin mucho esfuerzo.Si disfrutás de los jardines llenos de plantas, árboles y colores vibrantes, existen innumerables especies que podés cultivar para lograr ese paisaje soñado. Según tus conocimientos en jardinería, el tiempo del que dispongas y, sobre todo, las ganas que tengas, podés elegir el tipo de vegetación más adecuado para vos. Entre estas opciones, hay una planta nativa que resulta perfecta para llenar de vida y energía cualquier espacio.
La Lippia alba, conocida comúnmente como Salvia Morada o Salvia del Monte, es una especie perenne originaria de las regiones tropicales y subtropicales de América perteneciente a la familia Verbenaceae. Esta planta nativa se distingue por su característico aroma cítrico y es ampliamente valorada tanto en la medicina tradicional como en la cocina. Además, se utiliza como cultivo ornamental debido a su atractivo follaje y las delicadas flores que produce. Puede alcanzar una altura de entre 30 centímetros y 1 metro, y sus hojas, de color verde brillante, son estrechas y lanceoladas. Durante los meses de primavera y verano, florece en pequeños racimos con tonos que varían entre blanco, rosado y azul-purpúreo, lo que le aporta un toque delicado y bello a cualquier ambiente.
Esta planta nativa no solo es muy utilizada como vegetación ornamental gracias a su atractivo aspecto, sino también por sus múltiples aplicaciones. En el ámbito culinario, sus hojas aportan sabor a diversas preparaciones, mientras que en la medicina tradicional se le atribuyen propiedades digestivas, analgésicas y relajantes, y es comúnmente utilizada en infusiones o decocciones para aliviar malestares estomacales, reducir la ansiedad y favorecer el sueño. Además, su aceite esencial, con un característico aroma cítrico, es empleado en aromaterapia para promover la calma y el bienestar. Por otro lado, su fragancia también actúa como repelente natural de insectos.
Cuidados de la Lippia alba
- Luz: a la Lippia alba le sienta bien tanto la exposición directa al sol como la sombra parcial, aunque crece de manera más saludable y fuerte cuando recibe una buena cantidad de luz solar directa durante varias horas al día.
- Clima: prefiere climas cálidos y subtropicales, pero también puede adaptarse a climas templados. Es una planta resistente que se desarrolla bien en regiones con temperaturas suaves a altas, siempre que se eviten las heladas fuertes.
- Suelo: esta especie necesita suelos bien drenados, ligeramente ácidos a neutros. Un suelo ligero y suelto favorece su crecimiento, ya que no tolera el exceso de humedad que pueda provocar el encharcamiento.
- Riego: requiere un riego moderado, asegurándose de que el sustrato no se sature de agua. Es importante mantener un equilibrio, ya que el exceso de agua puede dañar sus raíces, mientras que la sequedad prolongada también afectaría su desarrollo.