Sin gastar fortuna en productos: así podés preparar aceite de zanahoria para mantener tu cabello y piel hermosos

Antes de gastar un montón de dinero en productos que prometen ser mágicos y a veces no lo son tanto, deberías conocer algunas de las propiedades más importantes de ciertos elementos naturales que te van a servir para el cuidado de la piel y también del cabello.

Por ejemplo, la zanahoria tiene grandes beneficios que harán que tu melena crezca fuerte y sana. Para tratar las puntas abiertas o la falta de nutrición, está este aceite esencial que podés tener a mano en tu casa para tus rutinas de belleza; no requiere de demasiadas técnicas.

Los ingredientes que vas a necesitar para hacer este preparado de zanahoria para el cabello son los siguientes:

• 2 zanahorias frescas (mejor si son orgánicas).
• Aceite base (puede ser: aceite de oliva, coco, almendra dulce o jojoba).

Lo primero que tenés que hacer en esta preparación es preparar las zanahorias. Para eso, vas a pelar y rallar muy bien todas hasta que estén bien granuladas. Después, será momento de pasarlas por la deshidratación. Si tenés una máquina especial para esto, mucho mejor; sino, podés hacerlo en el horno a temperatura baja y con la puerta apenas abierta, para que el proceso se haga lentamente. Sabés que están listas cuando estén crujientes.

Cuando las tengas, vas a colocar en un bol el aceite base que tengas. Realmente, el aceite de coco es lo mejor para esto. Poné el aceite a baño maría y agregá también las zanahorias deshidratadas mientras revolvés bien todo. Tiene que estar a temperatura baja, aproximadamente unas 2 horas, para que se infusione bien.

Una vez que tengas el aceite bien infusionado, vas a pasarlo por una malla coladora para sacar la pulpa y extraer solamente el aceite. Para conservarlo, tenés que hacerlo en un recipiente oscuro y mantenerlo en un lugar fresco y seco. Dura aproximadamente unos 6 meses, si querés aprovechar bien sus propiedades.

Para usarlo en el cabello, solo tenés que colocarlo de medio a puntas, usándolo como mascarilla y dejándolo actuar unos 30 minutos antes del lavado. Podés repetir este proceso unas dos veces a la semana.