Sin gastar más en la verdulería: así podés sembrar y transplantar plantas de espinaca en tu huerta

Sin importar si recientemente comenzaste a dar tus primeros pasos dentro de la jardinería o te considerás todo un experto, lo cierto es que todos podemos sumar más y más plantas al hogar, y aprender todos los tips de cuidado que cada ejemplar necesita para desarrollarse sin problemas.

De interior o exterior, existen plantas aptas para todos los gustos, con mayores y menores necesidades dependiendo de su exposición al sol, su frecuencia de regado, el abono que necesitan y el tipo de suelo, entre otras cuestiones importantes.

Si tu deseo es convertir la parte externa de tu hogar en una huerta, podés comenzar con algunas opciones que te brindarán los mejores resultados y te ayudarán a ahorrar en la verdulería, tal y como es el caso de las plantas de espinacas.

A continuación, te brindaremos los mejores trucos y consejos que te permitirán tanto sembrar como transplantar tus plantas de espinaca a tu huerta, por medio de pasos muy sencillos de replicar.

¿Cuál es el primer paso? Básicamente, lo que tendrás que hacer es sembrar las semillas de espinaca en un cajón de verduras, para a continuación ralearlas como paso previo a su traspaso a la huerta.

Luego, tendrás que correr todo el acolchado que protege el suelo y, como paso siguiente, deberás realizar en este último pequeños agujeritos por entre 4 y 5 dedos de distancia entre uno y otro, para añadir posteriormente tus plantas de espinaca.

Notarás que en muy poco tiempo obtendrás las más increíbles plantas de espinaca, perfectas para elaborar los más exquisitos platos mediante esta opción sumamente natural y de tu propia huerta, lo que te permitirá evitar gastar una fortuna en la verdulería.