Plantas: el cactus colgante que es muy fácil de cuidar y se puede tener en interiores

Si hay un elemento que rara vez está ausente en algún hogar y que puede llenarlo de vida, aire puro e incluso muchas veces los más exquisitos aromas, esas son las plantas.

Más grandes o incluso súper pequeñas, que ocupan mucho espacio o apenas un pequeño rincón junto a la ventana, las opciones disponibles son miles, dependiendo siempre de los gustos y preferencias de cada persona.

Si aún no te considerás un experto dentro del universo de la jardinería y querés comenzar añadiendo pequeños ejemplares o plantas de fácil cuidado, sin duda alguna una opción ideal para vos puede ser el cactus.

Y es que los cactus no requieren de minuciosos cuidados y, en líneas generales, pueden crecer prácticamente sin problemas, soportando elevadas temperaturas y sin un regado frecuente, entre otras cuestiones.

Entre las muchas plantas de este tipo entre las que podés elegir, en esta ocasión queremos destacar una en específico que no solo no requiere de muchos cuidados, sino que es perfecta para colocar en interiores.

Nos referimos nada más y nada menos que a los cactus colgantes conocidos bajo el nombre de “Cactus espina de pez” o también por su nombre científico “Epiphyllum anguliger”, una clase de planta que llama mucho la atención por la particular forma de sus hojas semejantes a la espina de un pez y que, como se mencionó, es de fácil mantenimiento.

En líneas generales, tenemos que destacar que estas plantas necesitan de un suelo mineral para desarrollarse casi sin dificultades y un regado más bien escaso.

Finalmente, para que estas plantas de porte colgante no pasen desapercibidas en ningún rincón y se vean mejor que nunca, necesitarán de mucha iluminación, pero no luz solar directa.