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Con solo 2 botellas de gaseosa: creá esto tan práctico para conservar por más tiempo tus verduras en la heladera
Con este truco, tus alimentos se conservarán por más tiempo, manteniendo su frescura y humedad.
En el presente artículo, te contamos cómo aprovechar las botellas de gaseosa para crear un práctico sistema de conservación para tus verduras en la heladera. Este truco casero es ideal para el hogar y ayuda a que las verduras se conserven por más tiempo, manteniendo su frescura y humedad.
Primero, tomá dos botellas de gaseosa de igual tamaño y cortá el pico de una y la base de la otra. Después, encastrá ambas botellas de modo que sus extremos cortados se unan perfectamente, formando una cápsula. Este ingenioso sistema mantiene las verduras dentro de las botellas, proporcionando una temperatura más cálida en comparación con el resto del refrigerador, lo cual es ideal para aquellas que no toleran bien el frío.
Al utilizar estas botellas de gaseosa como cápsulas, protegés las verduras del frío excesivo y las conservás en condiciones óptimas. Además, las cápsulas ayudan a mantener la humedad necesaria para que los alimentos se conserven frescos por más tiempo. Este método es económico, práctico y ecológico, ya que aprovecha materiales reciclados para mejorar la conservación de tus alimentos.
Truco casero para evitar el mal olor en la heladera
Por otro lado, te compartimos un truco casero muy sencillo para eliminar el mal olor de la heladera, algo común cuando guardamos alimentos que pueden desprender olores desagradables. Lo que necesitás es bicarbonato de sodio, un ingrediente muy versátil que no puede faltar en tu hogar.
Primero, colocá un recipiente con bicarbonato de sodio abierto en uno de los estantes de la heladera. Este absorberá cualquier olor desagradable de manera rápida y efectiva. Si querés reforzar el truco casero, también podés agregar unas gotas de esencia de limón o vinagre al bicarbonato para potenciar su acción.
Finalmente, el bicarbonato no solo elimina los malos olores, sino que también ayuda a mantener el aire de la heladera limpio, evitando que los olores se transfieran entre los alimentos.
