Por qué los tallos de mis suculentas se secan y cómo solucionarlo

Las suculentas son una de las plantas más fáciles de cuidar, por lo que los expertos en el mundo de la jardinería aconsejan a aquellas personas que quieren crear su propia huerta iniciar con este tipo de especies. A pesar de que no requieren demasiados cuidados, sí están propensas a enfermarse, por lo que se debe estar atento al estado de sus hojas y el color que tenga.

Es que este tipo de planta, al mantenerse con pocos elementos, es propensa a deteriorarse, si no se aplica un paso a paso adecuado. Por ejemplo, el regado es una parte importante para que la suculenta se desarrolle con normalidad, pues no debe ser muy seguido porque se puede ahogar, ni tan tarde que cause sequedad en sus hojas.

Una de las partes de la suculenta, que también puede estar seriamente afectada si no se atienden estos pasos, es el tallo. Esta área se puede secar y enfermarse, al punto de no dar más hojas verdosas. Pero hay formas sencillas de curarlas.

Trucos para recuperar una suculenta

En caso de que las hojas estén secas será una señal de que hay que regarla, pero para hacerlo de forma correcta y que recupere su vitalidad, es importante aplicar un método conocido como “terapia de hidratación”, el cual consiste en colocarla en un recipiente con agua para que absorba toda el agua que ha perdido.

Lo importante de esta técnica es colocar la planta sin sustrato, para que las raíces puedan estar en contacto directo con el agua. La suculenta se debe monitorear para ver los cambios y volverla a colocar en la maceta después de uno o dos días.

Si la planta se enferma a pesar de recibir un buen riego, puede ser un síntoma de problemas con sus raíces. Por eso, es recomendable revisarla y si presenta bultos que se asemejan a una papa. En ese punto, la única solución es retirar toda la raíz y volver a sembrar la planta con el tallo en un sustrato con bastantes nutrientes.