Con solo 2 ladrillos hacé una parrilla portátil que te va a salvar en más de una ocasión

En el mundo del reciclaje y las manualidades, la imaginación, el talento y la creatividad son características elementales para triunfar en tus elaboraciones. Aquí te mostramos cómo hacer una parrilla DIY.

Si sos una de las personas que disfruta de una de las comidas más tradicionales de Argentina, que mayormente se prepara los fines de semana o en ocasiones especiales como un cumpleaños, un feriado o simplemente un motivo especial, te contamos cómo hacer un asado de una manera insólita.

Ideal para esas escapadas o viajes en los que querés degustar de unas costillas a la brasa y no llevaste una parrilla, este es truco es muy sencillo y te salvará. ¿De qué se trata?

Tan solo con dos ladrillos previamente lavados y limpios como materiales para esta práctica y sencilla manualidad, obtendrás la parrilla portátil perfecta para salir del apuro.

Además de los ladrillos, debes tener a mano un martillo y procurá hacerle unos huecos más pronunciados en uno los orificios para que el calor del fuego cocine los cortes de carne y los vegetales que quieras asar.

Una vez que hayas realizado con cuidado este fundamental paso, hacé el fuego y colocá uno de los ladrillos de tu parrilla portátil totalmente casera y rústica de manera vertical. Es fundamental que verifiques que el fuego se expande y se eleva a través de los huecos que identifican a este tipo de ladrillo.

Ahora, llegó el momento de colocar el segundo ladrillo de manera horizontal, consolidándose como la parrilla de esta creación económica y DIY.

Finalmente, colocá los cortes favoritos de tu asado en la parrilla casera y moderna. Un detalle único de este elemento de ladrillos es que los chorizos podés dorarlos en los orificios, aprovechando cada uno de los espacios de esta genial idea que te puede salvar más de una vez.