Los difusores están re caros en las tiendas: prepará este casero, con el olor más delicioso y a tu gusto

Si sos un apasionado de que la casa huela bien, entonces seguramente pasás mucho tiempo en algunas tiendas oliendo aromatizantes hasta encontrar el difusor que sea de tu agrado. Hay de distintos tipos, calidades y por supuesto precios, pero no siempre los que buscamos.

Existen personas muy quisquillosas a la hora de encontrar un aroma que realmente les guste, hay quienes no soportan los perfumes demasiado dulces y empalagosos, otros que no aguantan los florales y quienes solamente prefieren unas combinaciones muy específicas de cítricos.

En esos casos no hay nada mejor que dejar de renegar intentando encontrar el aroma que más se adapte a tus gustos y en cambio fabricar vos mismo tu propio difusor casero, se hace con ingredientes y elementos simples y vos podés elegir la graduación y el tipo de perfumes que lo compongan.

Con esta idea sencilla y práctica vas a poder sumar un difusor a cualquier rincón de la casa o la oficina que se te ocurra, es una muy buena opción integrarlos al baño o a la cocina que normalmente son los espacios que más se llenan de olores un poco despreciables para la mayoría.

Lo primero que tenés que hacer es conseguir un recipiente bonito que contenga todos los líquidos para el perfume. Vas a comenzar agregando 70 ml de alcohol etílico y 30 ml de aceite base (puede ser aceite de bebé). Después vas a combinar el aroma de tu preferencia con la ayuda de aceites esenciales.

Aunque puede varias dependiendo la calidad del aroma que consigas, deberías agregar unos 30 o 35 gotas de las combinaciones de olores que quieras. Después tapá el frasco y batí muy bien. Por último, insertá las varillas de madera, que pueden ser de bambú y dejalo donde más te apetezca. Acordate de rotar las varillas de vez en cuando.