Receta fácil
Pan relleno de jamón y queso: una receta exprés y gratinada que vas a amar para la merienda
En cuestión de minutos, vas a tener un manjar para acompañar el mate.¿Te encanta innovar en la cocina y hacer diversos platillos con lo que tenés a mano en la heladera? Entonces, prepará esta increíble receta exprés, gratinada y de acabado crujiente que vas a amar para la hora de la merienda: unos deliciosos panes rellenos de jamón y queso. Se trata de una elaboración súper fácil de hacer en casa que, como descubrirás a continuación, se lleva a cabo con pocos elementos.
Lo cierto es que este riquísimo pan relleno estará listo en un abrir y cerrar de ojos. De hecho, prestá atención al paso a paso de una página de comidas, cuyo nombre es "Recetas Saludables Sanas", que compartió con sus más 8.876 seguidores en Instagram cómo lograr el sabor tan irresistible de dicho manjar para degustar y acompañar el mate en cuestión de minutos.

Ingredientes
- 3-4 panes franceses.
- Jamón y queso en fetas.
- 1 tomate y perejil (opcional).
- Yogur natural o crema de leche.

Los expertos de la gastronomía señalan que estos panes rellenos pueden hacerse de diferentes sabores, es decir, rellenos como más te gusten para disfrutar de una merienda digna de reyes. En ese sentido, podés reemplazar los embutidos por otros y agregar o quitar verduras y/ o productos alimenticios.

Cómo elaborar estos riquísimos panes rellenos salados para una merienda de reyes
- Lo primero que tenés que hacer es picar en cuadrados pequeños tanto el jamón como el queso. Poné ambos alimentos picados en un bol de cocina.
- Hacé lo propio con el tomate y el perejil. El paso siguiente es sumar una cucharada sopera de yogur natural o crema de leche. Mezclá bien todo para que los ingredientes se unan.
- También podés agregar una pizca de sal y/ o condimentar a gusto. Luego, con la ayuda de un cuchillo, sacá el centro (miga) del pan francés y con una cuchara vas a rellenarlo.
- El último paso es poner una feta de queso encima de tu pan relleno y mandar a horno —previamente precalentado a 180 °C— por unos 20 minutos o hasta que estén bien dorados.