Con solo 1 cosa que no falta en tu hogar: así podés dejar los grifos del baño y la cocina brillantes y sin manchas

Si sos un obsesionado de la limpieza, seguramente estás mirando cada uno de los detalles de tu casa. Hay ciertos rincones que son un poco más difíciles de limpiar, como los grifos. Suelen ser los elementos que más sarro y suciedad acumulan, y es difícil de remover.

Por ejemplo, las cañerías del baño siempre están en contacto con la humedad, el maquillaje, la pasta de dientes y otras cuestiones. Por ende, terminan manchados y terminamos gastando en productos muy específicos para devolverles el brillo natural y que no se acumule la mugre.

Eso sin contar si tenés alguna casa vieja y grifos ya un tanto manchados con el paso del tiempo. Ese tipo de suciedad es la más difícil de sacar, pero lo bueno es que no necesitás algo específico para solucionarlo; podés hacerlo con un elemento que seguramente tenés en casa.

Es tan fácil como buscar alguna vela blanca que tengas por ahí. Todos guardamos este objeto por si alguna vez se corta la luz y necesitamos iluminar los rincones. Te sorprendería saber cuántos usos le podés dar al sebo de la vela, incluso en la limpieza.

Lo que tenés que hacer es frotar la vela por tus grifos. Debido a su material espeso, formará una capa transparente sobre la cañería. No hace falta dejar que actúe por mucho tiempo, simplemente con frotarlo verás la diferencia.

Después solo tenés que retirar la cera de la vela con un trapo de microfibra y vas a ver cómo recupera el brillo original. Además, también lo hace impermeable contra la humedad para evitar el exceso de sarro. Hacé este ejercicio de limpieza al menos una vez a la semana y observá los cambios.