Planta
Mejor que un insecticida: la planta fácil de cuidar que ahuyenta a las hormigas de tu jardín para siempre
Tomá nota de estas recomendaciones.La planta comúnmente conocida como "buscapina" es en realidad la Parietaria Officinalis, una especie que no tiene relación con el medicamento antiespasmódico comercial del mismo nombre. Este nombre popular se debe a la asociación de la planta con una variedad de beneficios para la salud y usos terapéuticos.
Esta planta, también llamada albahaca de culebra, cañarroya, caracolera o hierba del muro, es una especie originaria de Asia oriental y norte de África, pero ganó presencia en muchos países y fue considerada invasiva en algunos lugares. La planta contiene sales de potasio y flavonoides, lo que le confiere propiedades diuréticas cuando se consume en infusiones. Además, posee sustancias amargas y taninos, que la hacen útil como emoliente, colagoga, vulneraria y antirreumática. Es especialmente valorada en casos de quemaduras, llagas, heridas y forúnculos, aplicándose en forma de compresas.
En cuanto a su potencial insecticida, hay evidencias que sugieren que ciertos extractos de plantas pueden ser efectivos para el control de insectos cuando se aplican al suelo o a las semillas. Sin embargo, es importante destacar que existen investigaciones que están intentando esclarecer cuáles son concretamente sus propiedades insecticidas.
Pero quienes se especializan en jardinería recomiendan esta herbácea como uno de los mejores repelentes naturales contra las hormigas. Es por ello que, si lo que querés es mantener tus plantas libres de plagas, ubicá esta planta en tu jardín.
Para su cultivo, es esencial proporcionarle un suelo rico en nutrientes y con buen drenaje, además de asegurar un riego adecuado sin encharcamientos. Prefiere la luz solar directa y temperaturas entre 20 y 25 °C. Con cuidados básicos, puede crecer vigorosamente, incluso llegando a ser considerada una especie invasiva si no se controla su crecimiento.
En el ámbito de la cosmética, se utiliza para refrescar la piel, tratar heridas de acné y descongestionar los párpados, preparando una infusión con sus hojas que luego se coloca en un recipiente de spray para aplicar sobre el rostro. Además de sus aplicaciones terapéuticas, esta planta también se utiliza en la cocina, donde sus hojas pueden ser un ingrediente en tortillas o ensaladas. Sin embargo, es importante tener precaución si se tiene alergia al polen, ya que podría provocar reacciones adversas.
Esta planta es un claro ejemplo de cómo la naturaleza ofrece soluciones y remedios que fueron utilizados por la medicina tradicional durante siglos, y que continúan siendo relevantes en la actualidad para el bienestar y la salud.