Planta
Apta para principiantes: la planta de moda que no necesita muchos cuidados y es perfecta para decorar tu casa
La naturaleza está en el medio de tu hogar de manera sencilla.Decorar la casa con un poco de naturaleza puede ser todo un reto para muchas personas, pues algunas plantas no son fáciles de cuidar y necesitan mucho tiempo. Sin embargo, y por fortuna para los principiantes, hay unas especies que pueden soportar más las adversidades y merecen menor atención.
Entre estas resalta la Monstera, una planta perfecta para el interior debido a su estilo, su color y el gran tamaño de sus hojas. Y es que este cultivo se destaca sobre el resto al ser tropical, por lo que puede soportar las difíciles condiciones de vida que puede tener al estar bajo el cuidado de un principiante.
El riego, uno de los retos más difíciles para los que se inician en este mundo, no es nada difícil con la Monstera, ya que solo hay que ponerle agua cuando su tierra está completamente seca. Además, esta planta es muy fácil de reproducir, pues se necesita cortar por debajo de un tallo para luego ponerlo en un recipiente con agua. A lo largo de dos meses, saldrán sus raíces y podrán volver a la tierra.
Uno de los problemas más comunes al tener una Monstera son sus hojas secas, la cuales comienzan a marchitarse desde las puntas. En este caso, se recomienda cortar la zona dañada e hidratar de manera abundante el resto de la plata con un rociador, sin la necesidad de que el agua toque la tierra.
Otra plata para interiores
La Monstera es uno de los ejemplos más importantes cuando se habla de alguna planta para interiores, pero obviamente no es el único. El Croton es una especie que también se usa mucho debido a los colores que aportan sus hojas para la decoración de cada hogar. Además, no necesita estar en contacto directo con la luz solar para crecer y mantener su forma.
La Cinta es otra planta para tener adentro de las casas debido al estilo moderno que tiene. Además, solo necesita ser regada una vez a la semana, aunque se recomienda hacerlo dos o tres veces cuando es verano, para no poner el riesgo la hidratación de sus hojas.