Consejos claves para cuidar a tus plantas de las heladas y que no se marchiten

Estamos en uno de los inviernos más fríos después de la última década. Aunque se supone que ya pasamos la parte más cruda, tanto agosto como septiembre podrían traernos algunas heladas inesperadas, como suele ocurrir. Las plantas son las que más sufren en este sentido.

La mayoría de las especies que no son para climas tan fríos, normalmente suelen morirse con los cambios repentinos de temperatura. Por eso, es importante extremar los cuidados y seguir algunos consejos de expertos en jardinería para no ser sorprendidos.

En principio, tenés que identificar cuáles son las plantas de tu colección más propensas a sufrir con el frío. Generalmente, se trata de las tropicales, las hortalizas, las suculentas y los arbustos jóvenes. Las que menos deberías preocuparte son las plantas perennes y los arbustos nativos, que tienen mayor resistencia.

Ahora bien, para protegerlas de las heladas, primero vas a investigar cómo suele ser el clima en tu zona y permanecer al tanto de las predicciones semanales. Entre las medidas de prevención que podés tomar está taparlas con materiales transpirables como mantas de jardín, sábanas viejas o telas de tul. Cubrí tus hierbas durante la noche.

Otro gran aliado de las heladas son las botellas de plástico: cortá la parte inferior de las botellas de plástico y colócalas sobre las plantas más pequeñas. De esta forma, vas a armar una especie de invernadero que mantendrá su microclima. Evitá regar por la noche y en cambio hacelo siempre por la mañana. El agua en el suelo proporciona cierta protección contra el frío.

Será mejor que agrupes a las más sensibles, ya que entre ellas generarán calor. Cuando pase la helada, cerciorate de cada una y cortá las hojas o ramas que estén dañadas por el frío. Otro punto clave es hacer que todas reciban la suficiente luz solar durante el día por el frío.