La planta de hipnotizante aroma que tiene Evelyn Von Brocke en su jardín y que podés cultivar vos mismo

Evelyn Von Brocke suele escaparse a la Patagonia argentina, específicamente a Neuquén, para descansar y disfrutar del frío, los bellos paisajes y la naturaleza característica de esa región del sur. Es habitual que, en sus redes sociales, la periodista comparta con sus miles de seguidores sus paseos por allí y algunos rincones de su casa. Tiempo atrás, en una publicación que realizó la panelista mostró la hermosa planta que eligió para decorar su jardín.

La periodista decidió decorar el jardín con Lavanda, una de las plantas aromáticas por excelencia, perfecta para tener en casa. Esta especie rústica y perfumada, elegida por Evelyn Von Brocke, es fácil de cuidar, ya que no requiere mucho mantenimiento. Con los cuidados adecuados florecerá en todo su esplendor durante la temporada de verano. La Lavandula es un género de plantas de la familia de las Lamiáceas, que contiene unas sesenta especies y es conocida como Lavanda, Alhucema, Espliego o Cantueso, entre otras denominaciones.

La planta que eligió la columnista de televisión es nativa de la cuenca mediterránea, pero en la actualidad se la cultiva en distintas regiones del mundo. Esta especie perenne, de tallos leñosos y muy foliados en la parte inferior, cuenta con hojas que varían entre lanceoladas a elípticas y una corola bilabiada, de color lavanda, lila, azul o violeta, aunque raramente puede ser blanca. La Lavanda que Evelyn Von Brocke tiene en el patio de su casa se utilizó desde la antigüedad como arbusto silvestre ornamental, así como para la obtención de esencias, aromatizantes y condimentos.

Cuidados básicos de la lavanda

Si querés llenar tu jardín de color, alegría y perfume, como lo hizo Evelyn Von Brocke, entonces no podés dejar de cultivar Lavanda. Esta planta se adapta a todo tipo de condiciones, lo que simplifica aún más su cuidado. A continuación, te mostramos todos los factores a considerar para que esta atractiva especie crezca y florezca de manera óptima.

• Luz:  es fundamental que la planta reciba sol directo durante varias horas al día, al menos unas seis. En caso de cultivarla en el interior, seleccionar un lugar con buena iluminación. Por otro lado, la lavanda necesita de espacio para crecer y de un sitio con buena aireación.
• Riego: solo se debe hacer cuando el sustrato esté seco, ya que sus raíces son capaces de guardar durante un tiempo la humedad. Al regar se debe evitar mojar sus ramas y flores para evitar la aparición de hongos.

• Sustrato: necesita un sustrato alcalino y que cuente con buen drenaje. Lo ideal es un suelo arenoso, que facilite la evacuación de agua, ya que es una planta que no soporta los encharcamientos ni los excesos.
• Abono: evitar cualquier clase de abono o fertilizante porque un exceso de este puede provocar que su floración pierda su aroma característico.
• Poda: con el comienzo de la primavera o la llegada del otoño (siempre antes o después de la época de floración), se aconseja realizar una pequeña poda que no supere la mitad del tamaño de la planta. No confundir la poda con la recolección de flores.