Bizcochitos de queso

Bizcochitos de queso con 3 ingredientes: la opción más fácil y rica para darte el gusto en las meriendas de verano

Los bizcochitos de queso se hacen en pocos pasos.
lunes, 3 de febrero de 2025 · 14:56

Durante el verano es ideal acompañar la merienda con una bebida refrescante a base de frutas de estación o en los días que no hace mucho calor, se puede servir una preparación caliente, como el café o el mate. Para complementar, lo recomendable es hacer recetas que rindan para varias porciones y se pueda compartir con la familia y amigos. Una de ellas son los bizcochitos de queso.

Esta preparación se hace con pocos ingredientes, por lo que no hay que invertir demasiado dinero en el mercado. Además, se pueden obtener más de 30 porciones, lo que los bizcochitos de queso son ideales para servir, incluso durante una reunión con amigos o como entrada en la cena.

bizcochitos de queso
Esta preparación rinde para muchas porciones.

Los ingredientes para hacer los bizcochitos de queso:

  • 300 g de harina leudante
  • 300 cc de crema de leche
  • 150 g de queso Mar del Plata
  • Sal y azúcar.
bizcochitos de queso
La receta se hace en sencillos pasos.

El primer paso para hacer los bizcochitos de queso es colocar en un bowl la harina y la crema de leche. Mezclar con ayuda de una paleta hasta conseguir una mezcla homogénea. Luego, se añade el queso rallado, para que se integre bien a la preparación.

Es importante formar una masa, pero sin necesidad de mezclarla por mucho tiempo. Una vez que se tenga una consistencia sin muchos grumos, se estira con ayuda de un palote en una superficie plana y enharinada. No es necesario crear una placa muy fina.

bizcochitos de queso
Esta preparación es ideal para la merienda.

Luego, con ayuda del cortador circular del tamaño de su preferencia se dividen las porciones y se colocan en una fuente para horno previamente engrasada. Opcionalmente, se puede pincelar la superficie con un huevo. Se llevan al horno a 180 °C por 20 minutos.

Cuando estén doradas, se retiran del calor y se dejan reposar a temperatura ambiente. Después se pueden servir. En caso de querer guardar las porciones que hayan quedado, lo mejor es colocarlas en un envase con tapa y dejarlos en un lugar seco y fresco.

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