3 remedios caseros para que las hormigas no se acerquen más a tus plantas favoritas

Una de las grandes enemigas de las huertas, cultivos y jardín son las hormigas; algunas de estas llegan para hacer destrozos en los frutos, hojas y hasta raíces. Por eso mismo es que existen cientos de trucos para hacer que se vayan y dejen de perjudicar tus plantas.

Por supuesto que podés utilizar los agroquímicos o cualquier veneno que te ofrecen en los viveros, pero ante todo siempre va a ser mejor y mucho más económico encontrar soluciones naturales. Con ingredientes que seguro tenés en tu heladera, lo vas a solucionar fácilmente.

Uno de los alimentos favoritos de las hormigas son los tomates, así que si tenés algunos de estos entre tus cultivos, seguramente vas a ver que tienen varios problemas de plagas. Antes de que acaben con todo, podés poner en práctica algunas soluciones muy sencillas, pero también efectivas.

El primero que podés probar es colocar en una tapita partes iguales de bicarbonato de sodio y azúcar. Vas a mezclar muy bien hasta que se integren los polvos, después lo vas a colocar en el camino en donde veas a estos insectos. Atraídas por el azúcar terminarán llevándose el veneno al hormiguero y así acabarás con ellas.

El segundo que podés poner en práctica son las cáscaras de pepino, solo tenés que pelar uno y vas a colocar esto en la base de las plantas que quieras proteger; cuando este vegetal se descompone, es tóxico para las hormigas. Cuando sientan el aroma, van a dejar la planta e irse a otro lugar.

El último es uno de los más efectivos, tenés que picar muy bien unos dientes de ajo y los vas a mezclar en aproximadamente un litro de agua, dejá estacionar todo esto por unas 12 horas por lo menos, colá separando el líquido y usalo para rociar la planta, el olor va a ahuyentar los bichos.