No tires esa vieja remera y convertila en esta increíble funda para almohadón, sin costuras y en pocos minutos

Antes de deshacerte de esa remera vieja que ya no usás, pensá dos veces, porque puede tener una segunda vida llena de estilo. Con un poco de creatividad y sin necesidad de agarrar una aguja e hilo, podés transformarla en una increíble funda para almohadón que le dará un toque único y original a cualquier rincón de tu casa. Una idea fácil, económica y perfecta para reciclar con onda.

Además de ser una opción sustentable, esta funda hecha con una remera tiene la ventaja de ser súper versátil. Podés elegir una prenda con un estampado llamativo, un diseño vintage o un color neutro para combinar con tu decoración. Lo mejor es que no necesitás ser un experto en costura ni contar con materiales complicados. En pocos pasos, vas a lograr un resultado increíble que le dará un aire renovado a tus almohadones y sumará personalidad a tu espacio.

A continuación, te contamos el paso a paso para transformar esa prenda en una funda de almohadón de manera sencilla y rápida. Solo necesitás un poco de ingenio y ganas de darle una nueva vida a esa pieza que ya no usás. Buscá esa remera olvidada en el placard y animate a probar este proyecto. El resultado será tan increíble que querrás hacer más de uno.

Materiales

• Almohadón
• Remera vieja
• Tijeras

Paso a paso

1. Colocá el almohadón sobre la remera y cortala un poco más grande que su tamaño, asegurándote de quitar las mangas y el cuello.

2. Luego, cortá pequeñas tiras alrededor de los bordes de la tela.

3. Separá ambas partes de la remera y colocá el almohadón en el medio. Empezá a anudar las tiras entre sí para fijarlo bien y que la funda quede cerrada.

Y listo. Ya tenés una funda súper sencilla y práctica, sin necesidad de coser y con tan solo una remera vieja. Llená de estilo tu casa con esta original idea.