No tires los restos de vela y convertilos en una súper vela aromática multicolor sin gastar un peso

¿Tenés un montón de restos de velas olvidados en cajones, frascos o bandejitas? Esos pedacitos que alguna vez iluminaron tu casa o adornaron tortas de cumpleaños no tienen por qué terminar en la basura. Con un poco de ingenio y sin gastar un solo peso, podés transformarlos en una vela aromática multicolor que no solo es práctica, sino también súper original. Esta idea no solo recicla, sino que también decora y aporta calidez a cualquier rincón de tu casa. Lo mejor de todo es que vas a poder darles una segunda vida a esos materiales acumulados y convertirlos en algo completamente nuevo y único.

Además, lo más lindo de esta propuesta es que se puede personalizar por completo. Podés jugar con los colores de las velas, las formas, los recipientes y hasta con los aromas que más te gusten. Una esencia de vainilla, lavanda, eucalipto o algún cítrico puede darle un toque especial que llene tu espacio con perfume y personalidad. Al final, no solo vas a tener una súper creación hecha por vos, sino que también va a representar tu estilo y tus gustos. Este proyecto es ideal para regalar o darte un mimo deco sin romper el chanchito.

Eso sí, si querés que esta manualidad quede impecable, hay un par de tips clave a tener en cuenta: dejá secar bien cada capa de cera antes de volcar la siguiente. Esto evita que los colores se mezclen y queden desprolijos. También es importante no acelerar el proceso en la heladera, porque eso puede generar bordes marcados o textura rugosa. Lo ideal es tener un poco de paciencia, porque la cera no tarda tanto en endurecer y el resultado final vale completamente la espera. Ahora sí, andá a buscar todos los restos de velas que encuentres y manos a la obra.

Procedimiento

1. Lavá bien el frasco de vidrio y asegurate de quitarle la etiqueta si todavía la tiene. Para esta vela aromática se eligió una combinación fresca y relajante: limón y romero.

2. En un bol, colocá un poco de ralladura del cítrico y unas hojitas secas de esta hierba tan aromática. Esta mezcla será la encargada de perfumar cada capa.

3. La base elegida es de color blanco. Para lograrla, derretí velas comunes en una ollita a fuego bajo y, con ayuda de un tenedor, retirá la mecha.

4. Colocá el pabilo dentro del frasco y, si necesitás, podés ayudarte con dos palitos (tipo brochet) para mantenerlo centrado. Volcá la cera blanca derretida con cuidado dentro del frasco y dejá que se enfríe por completo antes de seguir con el resto.

5. Repetí el procedimiento para los demás colores: derretí la cera, volcala despacio y asegurate de dejar secar bien cada capa para evitar que los tonos se mezclen. Entre una y otra, agregá un poquito de la mezcla aromática de limón y romero para que el perfume se distribuya en toda la vela.

Así, con pocos materiales, transformaste esos restos olvidados de velas en una manualidad súper original y lista para decorar cualquier rincón de tu casa.